- 675 g de harina panadera
- 225 grs. de leche entera
- 120 grs. de agua
- 6 grs. de levadura fresca
- 40 grs. de mantequilla
- 10 grs. de miel de flores u otra variedad suave.
- 10 grs. de sal
- Opcional: semillas de sésamo o harina para espolvorear.
- Pon todos los ingredientes en el bol (en este caso de la kitchenAid) y con el gancho amasa a velocidad 1 durante 10 minutos.
- Tapa con film transparente o un paño limpio húmedo y deja levar hasta que la masa doble su volumen. Con una temperatura cálida, una hora.
- Saca la masa y sobre una superficie enharinada desgasifica la masa (quitarle todo el gas que la masa generó durante el levado). Esto se hace apretando la masa con las manos para quitarle el aire y que vuelva a su volumen inicial. Puedes undir el puño en ella, y la masa se desinfla enseguida y luego ya continuas con el procedimiento.
- Corta la masa en porciones aproximadamente del mismo tamaño. Yo lo hago de 60 gramos.
- Estira la masa con los dedos, y como dice Reme, cierra hacia dentro los bordes como si fuera una bolsita, le das la vuelta y la ruedas sobre la superficie para darle una forma redondeada, o bien un poco alargada.
- Tapa con un paño ligeramente húmedo y deja levar de nuevo hasta duplicar su tamaño, una 1/2-3/4 hora.
- Precalienta el horno a 220º, calor arriba y abajo, y mete la bandeja en la segunda ranura, en el centro. Cierra el horno y baja a 180º, y mantén unos 15-20 minutos. También dependerá del tamaño de los bollitos y de lo dorados que los quieras.
- Yo los espolvoreo con un poquito de harina, o le pongo semillas. Pero eso a gusto del consumidor.
- Saca y deja enfriar sobre una rejilla.
- Después puedes congelarlos en bolsas bien cerradas.
- Están tiernos y esponjosos.
HE encontrado por internet un manual de cómo amasar a mano, y me ha parecido muy instructivo. Os lo paso aquí y a mí también me sirve de recordatorio. Éste es el enlace por si queréis entrar y ver cada paso en video. CÓMO AMASAR A MANO
Preparar la masa para amasar:
Lo más fácil será amasar en una superficie plana que llegue a la altura de la cintura. Para preparar la superficie, la mesa u otra área de trabajo estable para amasar, límpiala con agua tibia y jabonosa, luego sécala por completo con un paño. Espolvorea harina sobre la superficie seca para que la masa no se pegue a la hora de amasar.
- Algunas recetas indicarán que tendrás que amasar dentro de bol. En este caso, se supone que sólo habrá que amasar durante un minuto o dos. Para las recetas que requieran un periodo de amasado de más de tres minutos, ten pensado emplear una superficie plana.
- Combina los ingredientes para la masa. Emplea la cantidad de ingredientes indicada en la receta que vayas a usar. Los ingredientes básicos para la masa normalmente son: harina, levadura, sal y agua. Mezcla bien los ingredientes con una cuchara de palo para preparar el amasado.
- Si te cuesta mover la cuchara de palo por la masa, querrá decir que está listo.
- Echa la masa en la superficie de trabajo. Deberá ser una bola pegajosa y suelta. La masa estará lista para amasarse.
- Apila la masa. Al principio estará pegajosa y será difícil de juntar. Continúa trabajando la masa con las manos, formando una bola. Aplasta y dale forma. Sigue haciéndolo hasta que la masa ya no esté pegajosa y sea posible darle forma de bola sin que se hagan grumos. Si la masa no deja de estar pegajosa, espolvorea un poco de harina sobre la superficie y sigue trabajando la masa. Incluso en las manos también puedes echar un poco de harina, y no se te pegará tanto.
- Golpea la masa: Presiona la masa con las bases de las manos, empuja ligeramente hacia adelante. A esto se le llama "golpear" la masa y ayuda a que el gluten empiece a activarse. Continúa haciéndolo hasta que la masa esté ligeramente elástica.
- Dobla la masa a la mitad y empuja hacia delante las bases de las manos para presionarla hasta que esté plana. Voltea ligeramente la masa, dóblala y presiónala de nuevo con las bases de las manos. Repite durante 10 minutos o según se indique en la receta.
- El proceso de amasado deberá ser rítmico y constante. No amases muy lentamente. Manipula cada parte de la masa rápidamente y nunca dejes que repose demasiado tiempo entre vueltas.
- Después de 10 minutos amasando, deberá verse una masa brillante y suave. Pegajosa, pero elástica al tacto. Si hay grumos, sigue amasando.
- Dale forma de bola y deja caer en la superficie de trabajo. Si la bola se mantiene intacta es que está lista.
- La mayoría de recetas te dirá que dejes la masa levar en un sitio tibio durante un tiempo. cuando haya duplicado el tamaño, habrá que desgasificar.
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