Revista Cultura y Ocio
Cuando la semana pasada, al final del anterior post, os contaba como Dolly Parton había sido la compositora, y primera interprete, del famoso tema central de la película "El guardaespaldas", "I will always love you" con Whitney Houston como protagonista, os avanzaba que esta popular melodía ya había sido parte importante de una banda sonora de cierto éxito. Como recordareis, se trataba de la comedia musical, basada en la obra de Broadway del mismo nombre "The best little whorehouse in Texas" ("La casa más divertida de Texas") con la Parton como principal interprete. En ese momento me venía a la memoria otro tema, de corte muy distinto al anterior, cuya letra se inspira y relata parcialmente la historia real de aquel burdel de Texas en el que se basa esta película. Hoy os narraré la trayectoria del "Chicken Ranch", que tanta música parece haber inspirado, y otro día (esto me acaba de venir a la mente), tal vez dedique algo de tiempo a recopilar un puñado, de los muchos temas, que a lo largo de la historia de la música, se han dedicado a narrar las penas y alegrías del oficio mas antiguo del mundo...puede estar interesante, pero hoy seguiremos en Texas....
Lo cierto es que casi todo el mundo en Texas lo sabía, el "Chicken Ranch" era un burdel muy popular desde que abrió sus puertas en 1844, a unos 2 kilómetros al este de la ciudad de La Grange, sede del Condado de Fayette. En sus inicios, la viuda "Mrs. Swine" contaba con tres jóvenes muchachas para satisfacer a la clientela, pero el local tuvo que ser cerrado durante la Guerra de Secesión americana. No os voy a aburrir con toda la larga, aunque por otra parte interesante, historia del burdel mas longevo y popular de Texas, un estado en el que la prostitución ni siquiera es legal. Pero voy a intentar dar algunas pinceladas, para hacer mas comprensible la importancia de este peculiar lupanar. Durante los (intermitentes) 129 años de existencia, el "Chicken Ranch", "La pensión de Edna" o "La Grange", recibía tras sus puertas (y bajo sus sábanas) a lo mas granado de todo el estado, el sheriff solía acudir cada noche para informarse de los últimos chismes y averiguar si algún cliente andaba jactándose de su ultima fechoría, a partir de 1946, el nuevo sheriff decidió poner una línea telefónica directa con el burdel, y así evitar tener que trasladarse allí cada noche. Alcaldes y concejales fueron los principales clientes en la década de los 50, poco después de que dejase de cobrarse un pollo por cada "trabajo" sexual (el exceso de aves en el patio trasero hizo que fuese conocido como "El Rancho de pollos").
En la década de los 50 llegó a tener hasta dieciséis señoritas, y se empleaban a fondo, con la cercanía de una base militar y un centro universitario, los fines de semana se formaba una enorme cola en la puerta del rancho (esta frase no va con segundas intenciones jeje). La base militar proporcionaba un helicóptero para facilitar el transporte a los soldados hasta el rancho, mientras que en la Universidad se convirtió en tradición enviar a los estudiantes de primer año, como prueba de iniciación. La popularidad creció por que se creía que muchas de las prostitutas no eran estrictamente profesionales, si no jóvenes universitarias que precisaban de dinero extra. Las chicas entregaban el un alto porcentaje de sus ingresos a Edna Milton (la nueva "Madame"), con el que contribuía a diversas causas cívicas locales, lo que la convirtió en uno de los mayores filántropos de La Grange, así mismo guardaba una parte para los gastos médicos o problemas, que sus chicas pudieran tener, incluso un fondo para la jubilación de estas. A principios de los años 70, el Departamento de Seguridad Pública comenzó a vigilar las actividades del rancho, paralelamente, un reportero de televisión ávido de fama (Marvin Zindler) comenzó una campaña de moralidad en contra del famoso burdel. Todo esto acabó obligando al gobernador del estado de Texas a cerrar (muy a su pesar) definitivamente "La Grange" en 1973.
Muchos cuentan que el cierre del burdel fue propiciado por el tremendo éxito de nuestro tema de hoy, pero no es del todo cierto, aunque "La Grange" salíera al mercado en julio de 1973, como parte del tercer álbum de los ZZ Top "Tres hombres" (London Records), coincidiendo con la campaña televisiva emprendida por el ultra católico Marvin Zindler, el local ya había sido cerrado temporalmente un año antes por el Departamento de Seguridad Pública, por lo que aquello era sólo cuestión de tiempo. Lo que si es cierto es que, este tema, que narra la historia del mas longevo y famoso burdel de Texas, se convirtió rápidamente en un "clásico del Blues" y, posiblemente, uno de los temas mas conocidos de la banda de luengas barbas de Texas, los ZZ Top. El éxito del disco los mantuvo durante año y medio de gira por todo el Estado, siendo "La Grange", el tema estrella en todos los conciertos. El guitarrista y vocalista de la banda, Billy Gibbons, relató a la revista Guitar World, que se compuso de manera simple, basándose en variaciones de un sólo acorde, intentando crear un ambiente sucio, sexual, con un pegajoso riff central interpretado con una Stratocaster del 55. Lo que no cuenta el bueno de Gibbons, es que este riff ya lo había escuchado anteriormente. Posiblemente nos encontremos ante un caso de "apropiación inconsciente", algo parecido a lo que le ocurrió a George Harrison con "My Sweet Lord" y el "He's So Fine" de las Chiffons, pero el caso es que "La grange" recuerda sospechosamente a "Shake your hips" (1966) de Slim Harpo, y sobre todo al boogie blues eléctrico del maestro de Clarksdale (Misisipi) John Lee Hooker, "Boogie Chillen" (1948). Tanto es así, que en 1992, el propietario de los derechos de autor del tema de Hooker, Bernard Besman, demandó a los ZZ Top por plagio, tras varios años de litigio, el Juez dictaminó que "Boogie Chillen" era un tema popular, de dominio público, y por tanto los barbudos del Rock no habían incurrido en ningún delito. En cualquier caso, una historia curiosa, un burdel que hizo felices a muchos e inspiró un tema impresionante, un clásico moderno, que hoy sigue haciendo felices a muchos otros...