La segunda semifinal de la Carling Cup la juegan el últimamente pisoteado equipo de Daglish, el Liverpool, contra el afortunado Manchester City de Mancini, o sea, Guatemala vs. Guatepeor.
El Liverpool, en Anfield, deberá mantener el gol de ventaja conseguido en el partido de ida donde después de haber podido convertir más goles en el primer tiempo, pudo haber perdido el partido en el segundo. Seguramente, el equipo formará con Downing, Henderson, Adam, y Gerrard en el medio, y le dará compañía a Carroll con la inclusión de Bellamy desde el inicio. Es difícil de creer que Daglish no utilizara para este partido tan importante a sus máximas figuras, aunque habrá que esperar a ver si se decide por incluír a Maxi Rodríguez que toda vez que entra ayuda mucho en la ofensiva, tanto para darle opciones a Gerrard, como para acompañar al solitario Carroll.
Por su parte, el Manchester City ha empezado a caerse a pedazos desde aquellos primeros 25 minutos de gran fútbol que jugó contra el Chelsea y que no fue capaz de sostener durante todo el partido. Sumado a eso, algunos caprichos de Mancini que insiste en confiar en Kolarov para resolver los partidos, y dejar afuera a Johnson o a Silva o a Barry sin que nadie llegara a entender porqué demonios no los pone a los tres juntos. Necesitando dar vuelta el resultado, conociendo a Mancini, es probable que incluyera desde el inicio a 10 defensores para cuidar de Hart e ir a cabecear en las pelotas paradas. Hablando en serio, con los buenos jugadores que tiene, es una vergüenza que el Manchester City terminara los partidos defendiéndose, rechazando la pelota lo más lejos posible, y olvidándose del buen juego que supo encontrar por momentos en algunos partidos anteriores al del Chelsea.
Desgraciadamente, los segundos 45' minutos de este partido serán jugados al unísono con los primeros 45' de la revancha de cuartos de la Copa del Rey entre Barcelona y Real Madrid, de manera que, todavía no decidí cuál, no seré capaz de cronicar uno de los partidos puesto que sigo siendo una sola persona. Es una vergüenza que dos partidos de interés mundial no estuvieran organizados de manera que no se interpusieran el otro con el uno.
Probablemente, cronicaré para todos ustedes (siempre quise decir "para todos ustedes" y no hallaba oportuna ocasión) el partido inglés, y dejaré grabando el otro para comentarlo el año que viene. Especialmente teniendo en cuenta que la instancia de la Carling Cup es muchísimo más importante que un simple Barcelona - Real Madrid en cuartos de final en el que van a llover misiles que reíte del apocalypse.
De continuado, la información previa del partido en cuestión: