
Carmen Chacón fue una política separatista de dientes conejiles y miope socialista española conocida como la niña de ZP, provincialmente conocida como La Chaco y mundialmente como La Bocachocho.
Aspiraba a ser presidenta y así conseguir su propósito, descuartizar España. Por suerte perdió todas las batallas habidas y por haber con Rubalcaba y tras estas batallas, acabó llorando como una magdalena.
Fue nombrada del "exitoso" ministerio de Vivienda del gobierno del PSOE, elegida por estar embarazada y provocar ternura, también fue un pago adelantado al apoyo catalán para perpetrar el poder de Zapatero.
Aquel día en el que, con una visible curva de embarazo y un rostro de de feminazi, ordenó a un militar: "¡Mande firmes!". Dio la vuelta al mundo. Eran los felices años de Zapatero.
Volaba hacia el estrellato cuando estalló la crisis y la realidad destrozó las ficciones. Zapatero se hundió. Arrastra su partido a la tumba del ridículo. Y Chacón dejó de ser ministra florero para convertirse en una actriz, pero que ha perdido el guión, aunque ha recuperado la N de Carme por el camino.
Carrera políticaSolo era una politicucha del tres al cuarto de Cataluña. En el 35º Congreso Federal del PSOE fue elegida secretaria de Educación, Universidad, Cultura e Investigación y tuvo la suerte de posicionarse al lado del entonces candidato José Luis Rodríguez Zapatero. Desde este instante, se ganó a Zapatero. Cuando ZP ganó las elecciones del 11-M, Zapatero le confió el ministerio de Vivienda.
Zapatero la cambió de ministerio al ver que no se le daba bien y la puso en el de defensa. Se tomó muy en serio su nuevo trabajo y no estaba en Madrid con motivo de los actos del Día de la Constitución. Se marchó de puente a Lisboa.
No asistió el 6 de diciembre al homenaje a la bandera en la Plaza de Colón, ni al acto en el Congreso con motivo del 30 aniversario de la Constitución. Estaba en Lisboa, donde acudió al famoso restaurante Bica do sapato.
En su primera Pascua Militar como ministra de Defensa, decidió presentarse en el Palacio Real con un traje de chaqueta y pantalón digno de un uniforme payasíl y pasarse por el forro el respeto a la corona y al rey. Hizo una interpretación más personal de los requisitos del protocolo y cambió el vestido largo por el esmoquin. También lució un masculino peinado y maquillaje. El atuendo de Chacón, de marcado estilo masculino, contrastaba con los trajes largos que lucían la Reina Sofía y la Princesa Letizia. El vestuario de la ministra se completaba con una blusa de color blanco de cuello mao, con una franja negra en la botonera que desde lejos se confundía con una corbata.
Gracias a la pericia y buen hacer de la ministra de defensa Chacón y sus antecesores socialistas en el cargo, España tiene un ejército perfectamente preparado para defender la integridad territorial. Pobre de aquellos que, en gravísimo alarde de inconsciencia, osen invadirla.
Según ella, España tiene el Ejército que Azaña soñó hace 80 años, ya qué, según ella, fue el primero en concebir un Ejército eficaz como lo eran el de Francia y Alemania, pero aquel proyecto se truncó por la guerra y la larga sombra de la dictadura. Lo expuesto por Chacón constituye nueva prueba de que los requisitos requeridos para ocupar un ministerio en España no son especialmente exigentes, y sólo en este contexto se puede encuadrar el delirio de chorradas, aderezadas con el inevitable aliño de analfabetismo y siguiendo fielmente el guion impuesto por la desmemoriada memoria histórica, proferidas por la ministra.
Carrera a la presidenciaSeguros de la derrota en las elecciones catalanas incluso descalabro de Montilla estaban ideando darle el pasaporte a Montilla y poner a Carmen Chacón en su lugar. ZP quería su Trini catalana. Lo malo es que ella se resistia a abandonar la escena nacional.
Chacón se sabría participante en la carrera para suceder a Zapatero. De cualquier manera, para ver la salida de Montilla por la puerta de atrás habrá que esperar a las elecciones municipales, donde el PSOE también daba por perdido el Ayuntamiento de Barcelona, que peor que perder el gobierno de la Generalidad.
Carme Chacón se atribuyó el doctorado en Derecho en su currículo como ministra de Vivienda. Lo cierto es que la falsa información, lejos de suponer su dimisión apenas tuvo eco y fue una de las principales candidatas a suceder al presidente del gobierno. La interpretación de sus movimientos tácticos dan argumentos solventes a quienes especulaban con la posibilidad de exista un plan, escrito y entregado, para convertir a Carmen Chacón en la próxima presidenta del Gobierno.
Los catalanes querían cobrarse su deuda y con Chacón de candidata tenían la papeleta resuelta. El paso definitivo sería colocar a Chacón de Vicepresidenta Primera y portavoz del Gobierno meses antes de las elecciones, luego candidata y a esperar a ver qué sucedía. ZP escurrió el bulto y convocó primarias.
Rubalcaba ya estaba tomando medidas del despacho de La Moncloa y esto le supuso un contratiempo. Barroso-Chacón fue la gran beneficiara del procedimiento anunciado por Zapatero para su sucesión. En cualquier caso, el esposo de la ministra de Defensa es un acreditado fontanero, un bombero sumamente eficaz y el muñidor en la sombra de más renombre en el PSOE. En contra de sus posibilidades, el rechazo que provoca su esposa en amplios sectores del partido, su endeblez tanto dialéctica como retórica y que quiere romper España.
Debacle de las autonómicas y municipales de 2011En su afán por conseguir llegar a Moncloa, tuvo un mal gesto con su partido y se desvinculó de la derrota. Solo dijo palabras vacías, que esto le obligaba a una reflexión profunda y colectiva. Aprendió de su amado ZP a esconderse en los momentos difíciles. Probablemente estaba ocupada explicando a los pacifistas de la acampada cómo los aviones de combate españoles luchan contra la munición que Zapatero había vendido a Gadafi y eso lleva mucho tiempo explicarlo.
RenunciaChacón dijo sacrificarse para evitar las primarias y por la unidad del Partido. Da un paso atrás para que el partido dé un paso adelante. El paso que tiene que dar el partido en las próximas elecciones, según las previsiones y visto el resultado de las elecciones municipales y autonómicas, no es un paso adelante: es un salto al abismo haciendo el ángel y con foso de pinchos en el fondo rollo Mortal Kombat.
Anteriormente dijo que las primarias eran la fiesta de la Democracia, pero puede que no esté para fiestas. Posiblemente se diera cuenta que sus adhesiones a "la puta España" de los cojones no se olvidan fue un error de bulto y en una rueda de prensa con cara de estreñida decidió anunciar su renuncia casi llorando.
El día anterior le robaron el coche y por lo visto tenía información muy comprometedora dentro. Intentaron buscarlo con la Máquina de recuperar coches robados, pero se le habían acabado las pilas. Ella afirmó que "Las maniobras de otros amenazan unidad de partido y estabilidad gobierno". Lo que hace suponer que Rubalcaba vuelve a jugar sucio como de costumbre. Que algo huele muy mal en el PSOE es sabido, ahora se pasan los estatutos por el forro y le hacen dar un paso atrás para dejar via libre a Rubalcaba. Todo esto lo anunció días después de presumir y vacilar de democracia interna. Cosas de la vida, los mayores no le dejaron jugar. Varapalo para las terminales mediáticas del zapaterismo como Roures y laSexta.
Volvió al asalto y presentó su candidatura para liderar el PSOE tras el tremendo batacazo electoral del 20-N de Rubalcaba. Lo hizo público en el Comité Federal, cuando se convocó oficialmente el Congreso para el mes de febrero de 2012.
Al parecer, habría sido convencida por varios "barones" que que apoyaban una candidatura alternativa a la de Alfredo Pérez Rubalcaba. Teniendo en cuenta el desplome del PSC en su feudo sin precedentes, poca esperanza tenía, pero era ahora o nunca.
Presentó su candidatura en Almería, bien lejos de Cataluña, para que nadie se acordase que es una perra nacionalista. La escusa (cogida por los pelos) para presentarla allí es que su padre es de ese sitio, cuando lo que pretendía era "ir de española" y buscar el apoyo de los socialistas andaluces, claves a la hora de elegir al que llevará el timón del Partido Socialista y en donde habría elecciones autonómicas en marzo de 2012.
Allí cambió su nombre de Carme a Carmen, tal como hizo José Borrell, ese que también cambia de nombre según convenga. Incluso se planteó ir con peineta y mantilla, toda de negro, detrás del Cristo o de la Virgen, aunque por debajo llevaría una camiseta de "Yo también soy Rubianes".
Tras sonarse los mocos y secarse las lágrimas, le dijo a Rubalcaba que no quería cargos ni en el PSOE ni en el Congreso. Ya claro, como que se los iba a dar. El caso es que estaba acabada en el PSOE y ella lo sabía.
En cualquier caso, esta es la puntilla que le faltaba para compartir el mismo destino que Ségolène Royal, que fue masacrada por Nicolas Sarkozy y ahora nadie se acuerda de ella.
Únicamente salió de su mutismo para hablar de "federalismo asimétrico" para poder darle la independencia a Cataluña y enterrar aun más sus posibilidades de sustituir a Rubalcaba.
Murió en 2017 mientras lavaba vasos de nocilla o algo así.