De la experimentación y el influjo irregular de diferentes corrientes, surge la inspiración para que artistas innovadores practiquen un desarrollo sorprendente y cautivador. Este es el caso de Carne Griffiths, ilustrador inglés que utiliza distintas materias primas y mantiene un estilo particular en el que el flujo del color y las líneas inverosímiles, son su marca personal.
Graduado en el Maidstone College of Art, sus creaciones contienen un arte figurativo y abstracto pasional e incluso dimensional, a ojos del espectador, que se perderá en una maraña imaginativa de colores y formas.
Caleidoscópico y poco comedido, la expresividad y cadencia de sus líneas hacen que cada retrato (por los que siente especial devoción) sean a la vez impactantes y cercanos. El suyo es un arte espontáneo, que utiliza diversos materiales con los que dar forma a las obras, desde grafito a tinta, pasando por líquidos por “artísticos” como el café, whiskey o el té.
No se siente pintor, aunque su trabajo es una respuesta emocional, una explosión de color que incide en la vida cotidiana de sus representaciones y la proyectan como un prisma tridimensional.
Muy recomendable su galería en internet, pero aquí os dejamos una muestra de su trabajo.
© Carne Griffiths
Margarita
© Carne Griffiths
Reveal
© Carne Griffiths
Protection
© Carne Griffiths
Another place
© Carne Griffiths
Guilt
© Carne Griffiths
Brave
© Carne Griffiths
Strength
© Carne Griffiths
Margarita
© Carne Griffiths
Margarita
© Carne Griffiths
Margarita