Que Casillas ha sido probablemente el mejor portero español de la historia es algo que, en mi modesta opinión, está claro. Como seguidor blaugrana que soy, siempre que el Barcelona jugaba contra el Madrid pensaba que aun en el supuesto de que alguno de los delanteros culés tuviera una posición clara de gol, tendría que batir a Casillas, lo cual no era nada sencillo.
A lo largo de su carrera, y desde el día que salió en aquella final de Champions sustituyendo a César, Iker ha realizado auténticos milagros bajo los palos. Todos tenemos en mente su parada a Arjen Robben en la final del Mundial de Sudáfrica en el año 2010.
Sin embargo, entre todas sus intervenciones, a mi particularmente me dejó sin palabras la que realizó en la temporada 2009/2010 en el estadio Sánchez Pizjuán ante un tiro del argentino Diego Perotti. Es lo más parecido a esos episodios de Oliver y Benji en los que el balón se congelaba en el aire y cuando parecía que iba a tocar la red, aparecía la mano salvadora del portero. Eso es exactamente lo que hizo aquella noche Iker Casillas...
Iker CasillasR.Madrid C.F.Sevilla F.C.