En un principio quería reservar en la Torre Eiffel pero intentaron cambiarme el día y la hora varias veces y busqué alternativas. Fué la mejor decisión que pude tomar.
Le Ciel de París es un restaurante de diseño perfectamente decorado y con la comida exquisita. Se preocuparon de que nos atendiera un camarero que hablaba castellano y, aunque había cola para entrar, no nos apuraron en ningún momento. Pudimos disfrutar de la cena en un ambiente perfecto.De primero tomamos la crema de marisco ( Homard ) típica del restaurante que estaba deliciosa. Después pedimos Dorada (Daurade Royale) y Pato (Canette) ... los dos platos muy ricos y nada escasos. Y de postre Creme Brulee, una especie de crema catalana riquísima.Otro de los fuertes de este lugar, además de su cocina, son las vistas. El comedor en semicírculo ofrece la vista de la ciudad de París con la Torre Eiffel en el centro. Todas las mesas están giradas hacia los ventanales y se disfruta desde cualquier punto del comedor. A las horas en punto la torre parpadea ofreciendo un espectáculo de luz que ya os mostré en Instagram.
El remate perfecto para un día muy especial... Je T´aime !