El Gobierno Valenciano ha aprobado recientemente el Decreto 39/2015, por el que se regula la certificación de la eficiencia energética de los edificios, que aclara ciertas circunstancias en cuanto a las obligaciones de los agentes inmobiliarios.
El Artículo 3 del Decreto delimita claramente las obligaciones de los agentes responsables. Los propietarios de los inmuebles serán responsables de “la obtención e inscripción de los certificados de eficiencia energética del edificio, exhibición de la etiqueta de eficiencia energética en toda oferta, promoción y publicidad dirigida a la venta o al arrendamiento del edificio, contratación de un control externo, cuando corresponda, y transmisión del certificado en la venta del mismo, o de su copia en el arrendamiento”.
Las obligaciones de los técnicos certificadores se describen de la siguiente forma: “de la exactitud y veracidad de los datos que figuren en los certificados de eficiencia energética de edificios, en relación con el edificio que se certifica, así como del cumplimiento del procedimiento técnico para la certificación energética, de conformidad con lo dispuesto en el capítulo II del Real Decreto 235/2013″
Pero la gran novedad es que por primera vez se establece la responsabilidad objetiva de los Agentes de la Propiedad, buscadores de internet y agentes análogos, ya que el Decreto dice:
“Los que ejerzan funciones de oferta, promoción o publicidad de venta o arrendamiento de edificios o parte de edificios, …(serán responsables de)…. las obligaciones que la normativa vigente establece en materia de oferta, promoción o publicidad de la venta o arrendamiento de edificio o unidades de edificio. Los agentes responsables deben conservar la documentación concerniente a la certificación energética del edificio para cualquier inspección o requerimiento, durante la vigencia del certificado.”.
En lenguaje llano: quien publicite u ofrezca inmuebles sin la etiqueta energética es responsable y será sancionado. Un gran cambio que, de ser prudentes, obligará a los agentes a cesar en la publicidad de los inmuebles incumplidores. Estaremos atentos al desarrollo de esta normativa, que ha caído como una bomba en el sector.