Cinco Jotas sorprende con su nuevo concepto

Sí. Estamos en un Cinco Jotas, por mucho que no lo parezca. Estamos, de hecho, en el único que queda y quedará en Madrid de esta mítica cadena de restaurantes de toda la vida que se replicaban por doquier en la zona centro ofreciendo una correcta cocina a precios contenidos en un ambiente de mesón tradicional.

El elegido para seguir adelante es este de Jorge Juan. El resto, serán restaurantes independientes que pretenden marcar tendencia por separado, con nombres, espíritu y cartas propias.

Nosotros nos hemos ido concretamente al callejón de Puigcerdá para descubrir un Cinco Jotas que poco tiene que ver, exceptuando el magnífico ibérico que sigue siendo su enseña, con el anterior.

Aún están ultimándose los detalles pero ya se puede disfrutar del espectacular proyecto de interiorismo que brota del estilo de Sandra Tarruella (Tragaluz, El Celler de Can Roca) y que se inspira en las dehesas onubenses y en los secaderos de Jabugo, y de los platos que ha ideado el equipo de cocina utilizando siempre las carnes más nobles en recetas frescas, elegantes y coloristas.

Hay platos originales, como el sashimi de secreto con algas o el tataki de presa ibérica. Hay platos de siempre que nunca fallan, desde unas imprescindibles croquetas a unos huevos rotos (eso sí, presentados a baja temperatura con una crema de guisantes y maíz). Hay platos de temporada, como la crema de setas silvestres o el canelón de rabo de toro y trompetas de la muerte sobre base de patata trufada. Y hay platos desnudos que, con cubrirlos de un buen jamón, es más que suficiente.

En compañía de un vino, la experiencia siempre será redonda, porque hay pocos maridajes más efectivos. El gran punto de este nuevo Cinco Jotas (además, tenemos que decirlo, de sus espectaculares terrazas a la calle y en la azotea) es su oferta por copas que, gracias al método Coravin, permite degustar grandes caldos de grandes añadas (un Clos Erasmus del 99 o un Vega Sicilia Único de 2007, mismamente) sin tener que descorchar la botella entera.

Y por todo ello, la visita a esta nueva apertura merecerá la pena. Porque es difícil hoy día encontrar fórmulas que llamen la atención entre tanta novedad y esta, aunque muchos quizá no lo esperaran, lo hace. Sin ninguna duda.

Calle de Puigcerdá, 2.

Precio medio: 30 euros.

Tlfn. 915 75 41 25