“En el manuscrito original de la entrevista que Ingmar Bergman concedió a Andrew Sarris en 1972, recientemente hallado, hemos podido rastrear algunos párrafos tachados que nunca vieron la luz. De su lectura se deduce que toda la carrera del colosal director sueco puede considerarse, en el fondo, un homenaje permanente a la figura de los Hermanos Marx. Esta sorprendente revelación fue expresada, sin dejar lugar a la sombra de una duda, por el director de “El séptimo sello” mediante las siguientes palabras:-Todavía vivía en Uppsala cuando vi el primer film de los Hermanos Marx. Se trataba de “Cocoteros”. Me hizo pensar en frutas y decidí en aquel momento que si algún día dirigía películas, una de ellas llevaría por título el nombre de alguna fruta. Como los Marx eran tan irreverentes, hice más evidente la referencia al añadir el adjetivo “salvajes” a mi título original: “Fresas”. Nadie captó el guiño. Después decidí hacer mis homenajes a los Marx en forma más individualizada, y dediqué mi film “El rostro” a Chico, del que sabía que era un caradura consumado. Tampoco nadie advirtió la alusión. Unos años después, dirigí “El silencio” con la única intención de que la figura de Harpo Marx fuera debidamente admirada en los festivales de cine más prestigiosos y por la crítica más sesuda, pero, inexplicablemente, nadie asoció a Harpo con mi película. En un futuro, como reconocimiento al hermano Marx que considero más gracioso, pienso rodar un film titulado “Funny y Alexander”. Veremos si entonces alguien cae en la cuenta…. Aunque no tengo demasiadas esperanzas.Yo creo que el cine entero debería estar al servicio de una buena causa. Para mí, reivindicar la figura creativa de los Hermanos Marx justifica plenamente mi carrera y le da un sentido que, de otro modo, no tendría. Mi prima, Ingrid Berman, se puso de su parte cuando la Warner Brothers trató de denunciarles por utilizar la palabra “Casablanca” en su film “Una noche en Casablanca”. Ya es sabido que Groucho replicó advirtiendo a los Hermanos Warner que ellos llevaban muchos más años siendo hermanos y que, por lo mismo, podrían demandarles a su vez. Lo que no les recordó (y sí hizo mi prima Ingrid en una postal que me mandó para felicitarme por mi vigésimo octavo cumpleaños) es que la Warner había copiado a Groucho para crear a su conejo Bugs Bunny en 1938, tomándole prestado su parloteo, su sarcasmo y el puro, que adoptaba, a la sazón, forma de zanahoria.”“Lawrence de Arabia iba a ser interpretada originalmente por Marlon Brando, pero David Lean no encontró un dromedario lo bastante fuerte para aguantarle sobre su joroba. Luego le ofreció el papel a Laurence Olivier, pero éste rehusó alegando que el polvo del desierto le secaría el cutis. El siguiente elegido fue Rock Hudson, quien estaba encantado de cambiar a Doris Day y a Jane Wyman por un camello, pero era demasiado alto para pasar por la puerta de Damasco sin agacharse, lo que le restaba prestancia. Probaron entonces con Mickey Rooney, pero comprobaron, al hacer la prueba de vestuario, que daba la sensación de ser un bebé envuelto en una toalla. David Lean estaba tan desesperado que incluso le hizo pruebas a Ronald Reagan, Walter Brennan, Lon Chaney Jr., Julián Mateos y Louis de Funés, sin terminar de ver a ninguno de ellos adecuado para el papel. No quedó ahí la cosa: Robert Mitchum tan siquiera llegó a ponerse el turbante, Dean Martin declinó el honor y Sammy Davis jr. , que pasaba por allí, se ofreció, pero su propuesta no fue aceptada por problemas de agenda. Frank Sinatra declaró a la prensa estar dispuesto a interpretar a Lawrence siempre y cuando le dejaran cantar “Pennies from Heaven” al cabalgar hacia Aqaba. Sólo entonces, cuando la desesperación cundía en el frágil corazón del director de “Breve Encuentro” alguien le sugirió a Peter O’Toole para el rol. “Se parece un poco”, alegaron, “y parece un tipo pulcro y educado”. “Está bien, contestó Lean, ya me da todo igual. Que venga O’Toole”. Y así fue como el protagonista de “Lord Jim” entró en la Historia del Cine”.“El mejor director de películas musicales de la historia es Francis Ford Coppola.”“¿Por qué nunca sabemos qué decir de Jack Lemmon? Porque Jack Lemmon es un recipiente en el que cabe cada uno de nosotros.”Editorial Claqueta les desea un feliz y venturoso 2014, lleno de amor, humor, cine, sexo y rock ‘n’ roll.
