Ciudad del Vaticano, el país más pequeño del mundo

El tema de los microestados es algo que daría para hablar largo y tendido, ya que por sus características geográficas, económicas e históricas, son uno de los puntos más curiosos que podemos encontrarnos en el “mapa mundi”.

Los hay que se conforman de cuatro islotes, de una ciudad portuaria, o como es el caso que vamos a ver hoy, de una plaza, varios edificios y un jardín. Vamos a echar un vistazo a las fronteras del Vaticano, el estado más pequeño del mundo.

Breve historia

No fue hasta 1929 cuando esta zona de 44 hectáreas ubicada entonces en medio de Roma se reservo su hueco en los mapas del mundo. Por medio de los Pactos de Letrán, la Italia de Victor Manuel III y Benito Mussolini, reconocían a la Iglesia Católica la soberanía de lo que hoy en día se conoce como Ciudad del Vaticano.

No obstante, antes de la unificación italiana, ya había existido un estado papal denominado Estados Pontificios. Por lo que en esencia no era más que un reconocimiento histórico de lo que Italia se tomó en su momento.

¿ Que podemos ver en la Ciudad del Vaticano ?

A pesar de que estemos hablando de un territorio bien pequeño, hay que tener en cuenta que aquí vive su santidad, el Papa, están los órganos dirigentes de la iglesia católica, y en su recinto nos encontramos con el templo más importante del mundo, la Basílica de San Pedro. Vamos a ver un poco los principales atractivos de la Ciudad del Vaticano.

La Basílica de San Pedro

Este es el templo de referencia para todos los católicos. Es la iglesia cristiana más grande   del mundo, y además de su historia, en su interior podréis contemplar  el  Baldaquino de San Pedro ( altar papal ), la Puerta Santa o la momia de Juan XXIII.    La Tumba de San Pedro

El que fuese apóstol, discípulo de Jesús y primer Papa de la Iglesia Católica Romana, tiene   su sarcófago en las grutas vaticanas, bajo la basílica de San Pedro, y más concretamente,  bajo el altar. Se tardaron décadas en encontrar sus restos, pero finalmente, en 1968, fueron   hallados.

La Plaza de San Pedro

Probablemente la plaza más famosa del mundo. Es una de las entradas a la Ciudad del   Vaticano, y cada año es visitada por millones de turistas, religiosos y devotos de todo el mundo. Cabe destacar el gran obelisco que se erige en medio, traído desde Egipto por Sixto   V en 1586, y frente al cual fue crucificado San Pedro. Se le considera el testigo mundo de su muerte.

Grutas vaticanas

En el subsuelo de la Basílica de San Pedro se encuentran las tumbas de unos 100 papas, entre los que destacamos la de Juan Pablo II.

Los Museos Vaticanos  

Se denomina “museos vaticanos” a los museos que se encuentran dentro del recinto de la   Ciudad del Vaticano. Son colecciones religiosas que abarcan la escultura, la pintura, e incluso la literatura, con la magnífica Biblioteca Vaticana. En las galerías vamos a poder   encontrarnos con obras de los artistas más representativos de los últimos dos mil años.

En la Ciudad del Vaticano hay mucho por ver, disfrutar y aprender. Y a pesar de que sea un país totalmente independiente, no necesitaréis ni pasaporte ni visado alguno para entrar. Os recomendaría que si vais a Roma, vayáis al Vaticano, y de ser posible que visitéis más de sus lugares, como la farmacia, la estación de tren, etc.

Y bueno, a pesar de que el Vaticano no pertenezca a Italia, en la oficina de turismo de Roma podrán informaros al respecto.

Curiosidades de la Ciudad del Vaticano

Un estado tan pequeño se presta para muchos datos curiosos:

• Con sus 44 hectáreas, es el país más pequeño del mundo.
• También es el menos poblado, con poco más de 900 ciudadanos.
• La línea fronteriza con Italia es de 4 km.
• Tiene estación de tren.
• Es el único país del mundo con una tasa de alfabetización del 100%
• El país tiene su propio ejercito, compuesto por 100 miembros. La Guardia Suiza.
• Para ser miembro de la Guardia Suiza, entre otras cosas, hay que tener nacionalidad suiza.
• El dominio en Internet para el Vaticano es “.va”

Como llegar y donde alojarse

En la Ciudad del Vaticano no existe aeropuerto ( más que nada porque no cabe ), por lo que las maneras de llegar serían las mismas que tendríamos si fuésemos a Roma; cosa que probablemente sea lo que hagamos junto con las visitas al Vaticano.

Pues bien, si viajáis desde España, es posible que lleguéis al aeropuerto de Roma Ciampino, por lo que os recomendaría que echéis un vistazo al artículo que hace poco se publicó en el blog al respecto: Transporte desde el aeropuerto de Ciampino a Roma.

En cuanto al alojamiento, dentro del Vaticano no existen hoteles para el público general, por lo que nos tocará buscar alojamiento en las inmediaciones. Y bueno, como os imaginaréis, en una ciudad como Roma, hoteles hay para dar y tomar, para todos los gustos y colores, por lo que escoger no va a ser sencillo.

Ahora bien, si de verdad queréis descubrir la Roma más auténtica, os recomendaría que alquiléis un apartamento. En las grandes ciudades turísticas es habitual que los extranjeros se decanten por esta opción, ya que además de salir al final por un costo similar a lo que estaríamos pagando en un hotel, estaremos viviendo en una comunidad de vecinos local y podremos ser uno más. Hay apartamentos en Roma para estancias cortas, como días o semanas. Y se pueden reservar por Internet.