
Sin embargo, hay casos en que se presentan oraciones impersonales, en las que no se expresa quién realiza la acción del verbo, es decir, no hay un sujeto.
Las oraciones impersonales pueden ser:
- Oraciones con el verbo en tercera persona del plural: Llaman a la puerta.
- Oraciones en pasiva o pasiva refleja sin complemento agente: Ayer se acordó el aumento del salario.
- Oraciones activas que se construyen con se (agente indeterminado): Se está bien aquí.
- Oraciones de verbo unipersonal, no hay sujeto de la acción. Aquí se pueden presentar los siguientes casos:
- Hay verbos que pueden comportarse como unipersonales: ser, estar, haber, hacer, basta y sobrar: Es temprano; Hace calor; Hay partido de tenis.