Desde el punto de vista gramatical, las locuciones se pueden dividir en nominales, adjetivas, adverbiales, verbales, interjectivas, prepositivas y conjuntivas, según la función que desempeñan:
- Locuciones nominales: cabeza rapada, pata de gallo, diente de león, mesa redonda, mosquita muerta.
- Locuciones adjetivas: a cuadros, como un cencerro.
- Locuciones adverbiales: a cántaros, a golpes, entre pitos y flautas.
- Locuciones verbales: echar una mano, sacar de sus casillas, estirar la pata.
- Locuciones interjectivas: gracias a dios, mecachis en la mar, hasta luego.
- Locuciones prepositivas: a cambio de, de cara a, por medio de, en medio de.
- Locuciones conjuntivas: para que, a pesar de que, dado que, visto que, en caso de que.
Esta clasificación se basa en el comportamiento sintáctico de la locución y no en su estructura interna. Según el significado, las locuciones se pueden dividir en dos grupos: las locuciones con contenido léxico y las locuciones con contenido funcional. Entre las primeras se incluyen las nominales, adjetivas, adverbiales y verbales. En el segundo grupo figuran las prepositivas y las conjuntivas. Las interjectivas ocupan una zona intermedia.