Ya tenemos cogollos en el huerto, son un poco más grandes que los que venden pero tiernos a más no poder. Ya acabada oficialmente la “canícula” espero poder reanudar mi actividad bloguera como es debido, osea, regularmente.
Es un gustazo irselos comiendo. Ahora es tiempo de idas y venidas a la aldea. Aunque esté algo lejos, no queda otro remedio pues el huerto está ahora a tope lleno de verduras y hortalizas para recolectar. Hoy he puesto uno de estos cogollos de entrante y mirad que bueno ha quedado. Apenas necesita explicación pero aún así aquí los dejo como sugerencia.
*Al ser grande lo he puesto como entrante para dos personas
INGREDIENTES
-un cogollo partido en cuartos
-una lata de atún en escabeche
-unas tiras de pimiento asado aderezados con ajo, aceite y vinagre
-un huevo duro
-vinagre de vino
-aceite de oliva y sal
PREPARACIÓN
Lo primero ponemos a cocer un huevo en un cazo con agua. Cuando empiece a hervir contamos trece minutos y el huevo estará cocido. Lo pelamos y lo reservamos. Lavamos muy bien el cogollo y le quitamos las hojas más duras exteriores. Los que venden suelen ya venir limpios de ellas. Lo cortamos por la mitad y cada mitad a su vez por la mitad. Disponemos los cuartos sobre un plato llano y grande y les ponemos un poquito de sal. Aderezamos las tiras de pimiento asado con un ajo bien picadito, un toque de vinagre de vino y un chorrito de aceite pero no mucho, como una cucharada sopera más o menos. Así es como quedan aliñados,
Movemos bien y ponemos en cada cuarto de cogollo unas tiras de pimiento. Escurrimos la lata del caldo de escabeche que traiga y sin chafar mucho el atún lo ponemos también por encima de los cuartos de cogollo. A los lados ponemos el huevo cortado en rodajas finas. Por último, hacemos una vinagreta poniendo en una taza tres cucharadas soperas de aceite y una de vinagre, una pizca de sal y ligamos todo moviendo energicamente con una cucharilla. Vertemos la vinagreta por encima de los cogollos.