Revista Cultura y Ocio
Que sepáis que estoy terminando más series de las que esperaba en estos días y eso es una muy buena señal. Quizá debería guardarme alguna para cuando lleguen las vacas flacas. Pero por el momento, voy a aprovechar para dejaros mi impresión de la última temporada de "The Americans".
¡ATENCIÓN, LA ENTRADA CONTIENE SPOLIERS DE LA 3ª TEMPORADA!
¿Qué le ha pasado a esta serie? A pesar de que sigue manteniendo una estética perfecta, siento que la trama se está alejando demasiado para mis gusto, centrándose mucho más en los temas personales y no tanto en los espionajes. Entiendo el dilema de los dos protagonistas sobre qué hacer con su hija. A nadie le gusta tener que soltar una verdad tan dura y que quizá no sea comprendida.
Los problemas entre Elizabeth y Phillip por su situación con Paige me han resultado un poquito aburridos. Es cierto que ninguno se pone de acuerdo, pero también me está empezando a enfadas esa exclusividad que quiere tener y me resulta extraña porque antes no mostraban tanto tacto como ahora. ¡Será cosa de la edad!
Pero aunque la temporada ha sido más lenta de lo que yo esperaba, sí que ha tenido momentos culminantes y las misiones han sido muy emocionantes. ¡Más de lo que yo esperaba! Todo empezó a ponerse más interesante cuando se descubrió el micrófono en el despacho del FBI. Martha poniéndose nerviosa, Phillip mostrándole quién es, Stan engañando a Oleg o viendo cómo Nina se las ingenia para ir saliendo de la difícil situación en la que está metida.
Los protagonistas han tenido problemas con las misiones, han tenido que matar a gente, encubrir asesinatos y también lidiar con sus problemas personales. Phillip con el hecho de que su hijo está en la guerra de Afganistán y teniendo que contarle a Elizabeth esa situación. Por su parte, ella pendiente de la evolución de su madre y sabiendo que posiblemente no volvería a verla más.
Y en el centro de todo Paige. Sí, esa niña que se ha convertido en un quebradero de cabeza para mí y que ahogaría en una bañera sin ningún miramiento. Me aburre, me cansa esa actitud de tonta que tiene y para una vez que se confía en ella, resulta que la acaba cagando. Casi prefiero que se parezca a Henry, el niño que no es educado por sus padres y que vive pendiente de los videojuegos. Que son en definitiva... Sus mejores amigos.
Al final, Paige se enfrenta a sus padres y parece que la verdad no le agrada demasiado. ¿Qué más da que sean rusos o estadounidenses? Vale, lo de ser espías no es lo mejor del mundo. Pero podría haber sido peor. ¿Y si fueran narcotraficantes? ¿Proxenetas o algo similar? Pobre niña... Tanto soñar con Dios la ha dejado tocado.
Y el último capítulo ha sido el mejor de todos con diferencia y muchos os preguntaréis... ¿Por qué? Si ya habéis visto el capítulo sabréis porqué y sino... Os recomiendo que no sigáis leyendo. Por vuestro propio bien. Primero, no sabemos qué ha pasado con Martha, Stan está en una nueva posición que puede poner en peligro a la familia y Paige suelta la bomba. ¡Les ha delatado!
Acaba de decirle al reverendo que parece que siempre está fumado, que sus padres son rusos y menos mal que no le ha soltado que son espías. ¿Esta chica es tonta o es que nació ayer? Será que no le han dicho que es peligroso, que podría ir a la cárcel y bla bla bla. Pero a la señorita le da igual. Y cuando ellos se enteren... ¿Qué harán? Yo la mataría. Muerto el perro se acabó la rabia, pero imagino que no será tan fácil.
Me parece que la próxima temporada va a estar cargada de tensión y espero el momento en el que ellos sepan que su "adorada" hija les ha vendido. Si es que siempre tiene que haber un "judas" en la familia y en este caso le ha tocado el papel a Paige. ¿Y a vosotros? ¿Qué os pareció esta nueva temporada?
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