Aprender a vivir con pensamiento positivo es un aprendizaje saludable para todos, incluso para los optimistas porque siempre pueden aspirar a serlo más todavía. Todo ser humano tiene dos motores fundamentales en su vida que puede utilizar en su propio beneficio para sumar felicidad. La fuerza de voluntad y la inteligencia tienen el poder de cambiar el mundo.
En 3Contigo, conscientes de que la felicidad es un tesoro vital al alcance de todos, te damos las claves para fijarte más en tus alegrías que en tus tristezas:
1. En primer lugar, despide cada día con un acto de gratitud en el que recuerdes tres momentos que han sido importantes para ti. Fija tu atención en esos instantes y da las gracias a nivel interno porque esas vivencias te han enriquecido. Este pequeño ejercicio te ayudará a conciliar el sueño de una forma más agradable.
2. Escribe un diario emocional en el que dejes testimonio por escrito de tus pensamientos positivos, emociones agradables, instantes que no quieres olvidar, personas importantes, fechas señaladas… La escritura te ayuda a poner palabras bonitas a tu mundo emocional porque te permite reflexionar sobre el modo en el que quieres escribir algo. Es más fácil pensar algo antes de decirlo cuando estás escribiendo que cuando estás conversando con alguien y todo fluye de una forma más directa.
3. Cuando quedes con tus amigos para tomar un café, anímate a hacerles cómplices de tus alegrías. Siempre tienes motivos de alegría en tu vida. Puedes elaborar una lista de treinta razones por las que eres una persona afortunada. Una vez que tengas esas treinta razones, márcate el objetivo de incrementar la lista hasta cincuenta.
4. Aprovecha el tiempo para hacer cosas interesantes hoy y no dejarlo todo para cuando llegue un momento mejor ya que no existe instante más idóneo para ser feliz que ahora. Si te apetece ir al cine para ver una película, entonces, concreta ese plan en tu agenda para esta misma semana.
5. Tienes un montón de recuerdos en tu corazón que forman parte de tu memoria emocional. En ese caso, de una forma consciente, recréate cada día en los momentos más felices de tu vida. Cierra los ojos y viaja con tu imaginación hacia aquellos lugares que han marcado tu presente.
6. Mira a tu alrededor para darte cuenta de que existen otras personas a las que puedes ayudar con gestos tan sencillos como tu sonrisa. Este es uno de los principales estímulos para sonreír más porque cuando eres optimista, entonces, también generas una ola de energía positiva a tu alrededor.
7. Ser feliz es una decisión que asumes a través del compromiso vital de fijarte más en tus alegrías que en tus tristezas. Hoy puedes dar un paso hacia adelante para ver tu vida de una forma más objetiva. Celebra cada nuevo día con un buen desayuno en el que brindes por ti.
Maite Nicuesa para 3Contigo Coaching
Coaching personal, profesional y para la salud en Madrid y Figueras.
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