Revista Ebusiness

Cómo hackear un idioma en un tiempo record

Por Vmartinp @vmdeluxe

En el preciso momento en el que estoy escribiendo este artículo me doy cuenta de que tengo exactamente 20 días para mejorar sustancialmente mi inglés. ¿El motivo? En 3 semanas estaré disfrutando del sol de California (EEUU): me voy a Los Ángeles y San Diego, y necesito subir un escalón mi nivel en este idioma. Probablemente cuando tú leas esto ya estaré allí (debido a que programo los artículos con unos días de antelación).

Como hackear un idioma

Derechos de imagen: Fotolia

Hacía tiempo que quería publicar un artículo sobre lifehacking, algo diferente a lo que he publicado en los últimos artículos, y esta me ha parecido una buena ocasión para hacerlo.

El año pasado en mi viaje a un evento de marketing de San Diego llegué allí pensando que mi inglés era lo suficientemente bueno como para no tener ningún problema de comunicación. ¡Qué iluso! Creo que no lo he pasado peor en mi vida (quizás estoy exagerando).

La cuestión es que tuve problemas. Yo había vivido en Londres hace unos años y allí me defendía, pero estamos hablando de hace 7 o quizás 8 años. Toda mi práctica, mi oído (con según quién, dependiendo de lo rápido que hablase) y mi fluidez habían desaparecido en San Diego.

Las charlas del congreso las podía entender perfectamente -a excepción de una keynote que hizo Marcus Sheridan en la que hablaba más rápido que un demonio-, pero en el momento de hablar con alguien llegaban los ehmmm, mmm, ahhh, ffffff, ya me entiendes.

Mi momento más angustioso fue cuando conocí a mi ídolo Lewis Howes. Estuve hablando en indio con él un rato y me sentí muy ridículo y frustrado conmigo mismo por no haber sido capaz de prever esa situación. Como dirían en inglés “Damn it!!!”.

Por suerte conecté muy bien con Lewis y desde entonces somos amigos y he mantenido el contacto con él.

Dicen que aprender un idioma en 30 días es muy complicado, por no decir imposible. Suerte que yo no estoy en la situación de tener que aprender inglés en un mes. Mi situación es muy distinta. Leo muchísimo en inglés, escucho muchos podcasts en este idioma y obviamente no me resulta del todo ajeno.

Y te estarás preguntando: “pero Víctor ¿tú no hablas inglés?”.

Mi caso es muy diferente. Me falta práctica y necesito hackear este lenguaje en 20 días, ni uno más ni uno menos. Lo hablo pero no todo lo bien que a mí me gustaría.

Todavía me salen los colores cuando escucho los episodios de The Success Academy en los que pronunciaba mal “success”: en mi lista épica de malas pronunciaciones se encuentran “sacsés”, “sacses”, “sucses”. En fin, ¿tomato o tomeito?

La gota que colmó el vaso fue cuando un día recibí un correo de una persona muy indignada diciendo que era lamentable e intolerable que alguien como yo pronunciase mal Success… digamos que no le faltaba razón, pero en su momento tampoco me pareció algo tan grave como para que se indignase por ese tema, ella estaba realmente enfadada.

La cuestión es que sí que me hizo reflexionar y pensé “venga, vamos a ponernos las pilas con la pronunciación”. Aún así si escuchas mi podcast de vez en cuando alguna palabra mal pronunciada en inglés se me cuela. ¡Piedad! Es realmente complicado saber cómo se pronuncian algunas palabras si no practicas.

Bueno, a lo que iba, entendamos hackear por aprender de forma acelerada, buscando optimizar completamente mi aprendizaje con técnicas de memorización, práctica y repetición aplicando la mayor cantidad de atajos posibles.

Te voy a explicar cómo lo he empezado a hacer y las técnicas que estoy poniendo en práctica para lograrlo. Ten claro que esto mismo se puede aplicar con cualquier otro idioma, aunque seguramente el japonés o el chino sean 10 veces más complicados de aprender.

Me he creado un perfil en la red social Coach.me para hacer check-in cada día que cumpla mi reto (o cada día que me acuerde de hacer check-in). Si quieres agrégame como amigo en esa red social y compartimos retos.

Buscando la inmersión en el idioma

Una de las mejores formas de aprender un idioma es mediante la inmersión, que consiste idealmente en ir a algún país donde se hable el idioma que quieres aprender.

En este momento de mi vida no puedo irme más de 2-3 semanas a ningún sitio, por lo que la inmersión en otro país la he de descartar.

Me estuve informando sobre este tema y nada se adaptaba a mis necesidades.

Miré cursos intensivos online de inglés y no encontré nada interesante. Sí que había cursos intensivos presenciales, pero mi estilo de vida no me permite cursarlos. Hoy estoy en Barcelona, mañana quizás tenga una reunión en Madrid o una ponencia en Alicante.

No me importaba pagar lo que fuese por un curso intensivo online que cumpliese con todo lo que yo necesitaba, pero no lo encontré.

Como la inmersión real no es viable para mí, ni encontré nada online, me propuse simular mi inmersión:

  • Todos mis dispositivos y programas del ordenador y teléfono móvil están en inglés: con esto lo único que hago es no dejar de pensar en inglés, y familiarizarme con algunas palabras extra.
  • Mientras trabajo escucho música podcasts en inglés. Aunque no pueda prestarles toda la atención que me gustaría, voy escuchando por momentos y eso ayuda.
  • En el coche llevo CD’s con entrevistas. La revista Success te regala cada mes un CD que contiene varias entrevistas (obviamente en inglés). Las horas de conducción las paso junto a Tony Robbins, Jack Canfield o Darren Hardy.
  • ¿Noticias? En inglés of course. No veo la televisión en absoluto, pero de vez en cuando me pongo la BBC, la CNN o Fox News para intentar escuchar diferentes acentos.
  • Conversaciones cada día en inglés. Te explicaré más abajo cómo lo hago.
  • Leo en inglés para seguir aprendiendo palabras nuevas.
  • Escucho podcasts antes de dormir.

Conversaciones en inglés

En mi caso este es mi punto débil. El hecho de no poder practicar hace que tu habilidad para poder hablar un idioma se oxide y pierda fluidez. Esto pasa con cualquier cosa, y aunque dicen que una vez has aprendido a hacer algo nunca se olvida, sí que es cierto que si no practicas perderás tu habilidad.

En mi caso gracias a mi socia Billie Sastre, que domina a la perfección el inglés, he podido practicar cada día. Conversaciones por Skype sobre diferentes temáticas porque a mí lo que me interesaba era poder hablar sobre cualquier tema y poder mantener una conversación.

Billie hace muchos años fue profesora de inglés y me enseñó el método que ella ponía en práctica con sus alumnos, que consiste en la “self correction” o auto corrección. Como las conversaciones que tenemos son por video llamada o de forma presencial, cada vez que metía la pata Billie ponía cara de no entender lo que yo decía, cosa que me obligaba a corregirme yo a mí mismo.

Además de trabajar con Billie, he tirado de todas aquellas personas inglesas con las que veía que podía contactar y mantener pequeñas conversaciones por Skype.

Me busqué algunas clases particulares y también webs en las que puedes hacer intercambio de idiomas con otras personas que quieren aprender español en este caso.

Estas son las herramientas que utilicé:

  • Tus clases particulares: en esta web encontré varios profesores que dan clases particulares a domicilio. Encontré algunos profesores que cobraban 10 euros la hora, inversión que te recomiendo hacer antes que cualquier curso.
  • italki: luego descubrí esta web en la que puedes encontrar profesores para cualquier idioma a precios de ganga. Es una auténtica pasada.
  • Intercambio de idiomas: a través de Tim Ferriss descubrí algunas webs para hacer intercambio de idiomas, es decir, tú le enseñas a la otra persona español y ella te enseña a ti su idioma. Estas webs son My Language Exchange e Interpals.
  • Comidas en inglés: Andrew Funk organiza semanalmente en Barcelona comidas en inglés y esto me parece una iniciativa estupenda para poder practicar. Sólo he ido a una por falta de tiempo, pero me parecía interesante mencionar este tipo de iniciativas. Seguramente en tu ciudad también se haga algo parecido.

Para mejorar mi oído

Mi listening tenía que mejorar sustancialmente y para eso lo que he hecho ha sido tratar de forzarme a escuchar cuantos más podcasts mejor.

Cuando más atención le puedo prestar a los podcasts es antes de dormir, porque durante el día sí que los escucho, pero con el trabajo a veces no puedes prestar toda la atención que te gustaría.

También al conducir, como te he explicado, con los CD’s de Success he tenido buenas horas de aprendizaje ameno al volante.

Importantísimo escuchar podcasts de diferentes temáticas y diferentes personas, hombres y mujeres, porque a la que te acostumbras a escuchar a un autor determinado y entender todo lo que dice, tienes que intentar saltar a otro. No todo el mundo pronuncia igual, y esforzarte para entender es algo que a mí me ha ido muy bien.

Además de escuchar mis podcasts favoritos habituales como Pat Flynn, John Lee Dumas, Lewis Howes o Tim Ferriss, he estado escuchando cosas tan interesantes como jardinería, finanzas, cuidado personal o historia… eh, poca broma, materia interesantísima!

Entre 1 y 2 horas por la noche antes de quedarme dormido es lo único que escuchaba.

Sin dejar de lado la lectura

Leer es lo que nunca he dejado de hacer y gracias a eso seguramente mi inglés no se haya oxidado del todo. Me encanta leer tal y como contaba en el artículo que explico cómo leer más rápido.

Voy a libro por semana, los devoro.

En los últimos días únicamente he leído en inglés. Estas son mis víctimas de los últimos días:

  • The Miracle Morning de Hal Elrod. Un libro que se ha convertido en un must para mí y que le recomiendo a todo el mundo (afiliado)
  • Money, de Tony Robbins. También me ha gustado aunque es bastante grueso y he tardado más de una semana en completarlo.
  • Like A Virgin: Secrets They Won’t Teach You at Business School, de Sir Richard Branson, uno de mis ídolos. Tenía este libro desde hace tiempo y lo perdí en casa. Cuando lo encontré lo leí muy rápido porque se entiende perfectamente y es muy inspirador.
  • How to Shine: Insights Into Unlocking Your Potential from Proven Winners, de Simon Hartley. Este libro lo compré en Londres la última vez que estuve allí y qué te puedo decir más que WOW. Me ha encantado.

Todo esto por supuesto leyendo también blogs y revistas. Creo que el 95% del contenido que consumo está en inglés.

Cuando leo trato de señalar las palabras que no conozco, pero no busco su significado al momento si lo deduzco, me lo apunto en una hoja y cuando termino de leer busco su traducción y la anoto.

He memorizado el significado de las 300 palabras más utilizadas en inglés, que representan el 65% de todo el material escrito en inglés. No está mal ¿verdad?

También he memorizado las listas de los verbos regulares e irregulares más utilizados, conjunciones y preposiciones, adverbios y adjetivos más comunes, cosa que siempre ayuda a la hora de hablar y entender.

Importantísimo también dominar las conjugaciones de los verbos.

Herramientas y webs para hackear el inglés

Hay muchas herramientas y webs para aprender inglés o cualquier otro idioma, muchas de ellas gratuitas, y aunque no creo que exista la herramienta perfecta y completa, sí que puedes sumar varias de ellas para lograr tu objetivo de hackear un lenguaje.

Te explico cuáles son las que yo utilizo:

  • Duolingo: no conocía esta herramienta y fue mi amigo Lasse Rouhiainen quien me la recomendó en una de las sesiones que tenemos en nuestro grupo de Master Mind. Duolingo es una herramienta gratuita a la que puedes acceder via web o bien a través de una aplicación móvil que está disponible para iOS (iPhone) y Android. Además, no sólo puedes aprender inglés, también tienes a tu disposición los módulos de Portugués, Italiano, Alemán y Francés. Me encanta esta aplicación porque puedes mejorar tu inglés escrito, tu pronunciación (detecta tu voz a través del micro de tu móvil u ordenador) y tu oído.
  • Memrise: esta herramienta es una maravilla. A veces me sorprendo de cómo puede ser que hayan cosas así gratuitas por el mundo. Increíble. Puedes aprender cualquier idioma: chino, ruso, coreano, japonés… ¡casi todos los idiomas! Y hay diferentes módulos para el idioma que quieras aprender. Esta plataforma hace un especial énfasis en la repetición y memorización, y además tienen algo que me encanta: cuando tienes dificultades para memorizar una palabra, puedes ver una imagen que te ayude a recordarla. Te pongo un ejemplo de una captura de pantalla que he hecho con mi móvil.
    IMG_1226
    Esta herramienta también la encuentras para iPhone y Android, pero los cursos sólo los puedes añadir a tu cuenta a través de la página web. Mi recomendación es que no te apuntes a muchos cursos a la vez porque cuando entras a la herramienta a través del móvil puede ir un poco lenta.

Conclusión

A día de hoy cualquiera puede aprender el idioma que quiera desde la comodidad de su casa. Únicamente necesita disciplina y las herramientas necesarias para poder hacerlo.

Verás que curiosamente las mejores herramientas que hay en internet son gratuitas y que además hay una cantidad ingente de información a tu alcance para que aprendas lo necesario.

Por último, mi mejor recomendación es que practiques porque de lo contrario todo esto no sirve de nada, y aquí es donde quizás sí que tengas que invertir un poco en un profesor particular que te permita mejorar tu inglés oral y tu oído.

Este es mi approach para aprender de forma acelerada un idioma, y aunque estoy seguro que muchos profesores de inglés se estarán llevando las manos a la cabeza, os puedo asegurar que es mucho mejor que no hacer nada, o ir 2 veces por semana a una academia de inglés.

Sólo necesitas planificación, compromiso y perseverancia.

Me gustaría saber qué opinas de todo esto y cuál es tu experiencia.

¡Gracias de antemano! Que sepas que respondo a todos y cada uno de los comentarios que me dejan

:)


Volver a la Portada de Logo Paperblog