Cómo organizo mi primer curso online: Técnica clásica.

Para ser desmesurado, este post, es bastante singular. Voy a desarrollar de forma concreta y simple una técnica de exploración y organización de contenidos con la cual podés escribir desde un ebook hasta un Programa completo de mentoría. 
Por una hora, alejate del ruido y concentrate en la guía porque tiene el potencial de estructurar la información que relevaste para que, finalmente, tome forma de producto digital.
¿Empezamos?

La técnica clásica.

Explorar un tema es analizarlo a la luz de preguntas de orientación que te permiten ir más allá de lo evidente. Esta técnica va a ayudarte a profundizar en el tópico que hayas seleccionado a la vez que le das un orden comprensible para quienes vayan a leerlo.
Pero, antes de comenzar tenés que tomar una decisión.
La primera decisión en todo este viaje de creación es si tu producto digital va a ser para principiantes en la materia o para quienes ya tienen conocimientos al respecto. 
Es elemental que definas este aspecto en particular, no solo porque cambia tanto la perspectiva de la exploración como la estrategia de difusión y promoción del resultado.
Luego de que tomaste esta decisión, si te inclinaste por un producto digital para principiantes, vamos a amigarnos con Aristóteles. El hombre tenía lo suyo de radical pero en lo que refiere a racionalización, dejó huella. 
De acuerdo a la técnica clásica aristotélica, la mejor forma de aproximarse a un tema es:
1- Definir.2- Comparar.3- Abordar las causas.4- Manifestar los efectos.5- Argumentar.
Antes de que sufras de parálisis por análisis, vamos a explicar brevemente qué tendrías que hacer en cada uno de los pasos mencionados:

1- Definir el tema:

Si tu producto digital es para principiantes, la mejor secuencia didáctica comienza por una definición, breve y fácil de comprender. 
Atención: no me estoy refiriendo a una definición de diccionario sino a una explicación natural, en tus propias palabras sobre el tema que seleccionaste. Incluso tendría cabida explicar por qué lo seleccionaste para compartir en el formato de producto digital y cuál es la relevancia que puede tener en la vida de quien lee.
Es el momento de abordar los pilares o las nociones básicas que facilitan la comprensión de todo el material que viene después. Como mencioné en el primer post de organización de contenidos, los pilares están representados por grandes interrogantes:
- Qué- Quién- Cómo.- Dónde.- Cuándo.- Por qué
No te desesperes si no todas las preguntas anteriores aplican al tema de tu curso online. Lo importante no es que las detalles únicamente por cumplir con un modelo, sino cuando realmente significan un aporte de valor para tu lector-cliente.

2- Comparar:

Cuando un lector no tiene conocimientos previos sobre un tema, la mejor forma de orientarlo desde el punto en el que se encuentra, al punto al que tiene que llegar para entender, es comparar.
Dicho de otra forma: poco puedo entender sobre cómo decorar mi casa al mejor estilo de los nórdicos, si primero no conozco cuáles son las características fundamentales de este estilo y las puedo contrastar con una referencia que ya poseo: el minimalismo, la decoración monocromática, el uso de las texturas naturales sin tratamiento estético, etc.
Tu trabajo como escritora va a consistir en encontrar los elementos de comparación que ayuden a tu lector-cliente ideal a aprovechar al máximo el material que preparaste. De lo contrario, va a sentir que fue una compra inútil. Y ciertamente, no queremos eso...
Una sugerencia extra: para comparar es que tenés que tener muy en cuenta el contexto de tu lector cliente y su código cultural. Porque te quiero ver persuadiendo a un cubano de los beneficios de la decoración nórdica...

3- Abordar las causas:

Este apartado es muy flexible en función de la materia que hayas seleccionado. No es lo mismo abordar las causas de un hecho histórico en un ebook sobre la Primera Guerra Mundial, que las causas por las cuales la pasta de yeso se transforma finalmente en una obra de arte sólida.
En todo caso, quiero que pienses en lo siguiente: los seres humanos somos curiosos. Nos encanta encontrar respuestas a todos nuestros "por qué". 
Si querés enseñarme a crear figuras de yeso para producir en serie, es una buena idea que me brindes una noción básica del proceso de fraguado.
¿Por qué?
Porque una cosa es decirme: "No desmoldes la pieza antes de que se enfríe" .
Y otra muy distinta, explicarme que mientras la pieza está tibia el proceso de fraguado aún está activo y al desmoldarla, se quebraría. No es un capricho: es una razón técnica que puedo comprender y por lo tanto, es más sencilla de retener y aplicar.

4- Manifestar los efectos.

Cuando estés pensando en escribir un producto digital, tu experiencia personal es un factor clave. No solo es aplicable a los materiales técnicos, como tutoriales o recetas sino también para aquellos temas abstractos y complejos, como podría ser la superación personal o la autoestima.
La interpretación de "los efectos" en tu producto digital, supone que relates de forma clara y sencilla qué puede esperar tu lector-cliente a medida que realiza el proceso que estás proponiéndole.
En este aspecto, son tan importantes los detalles que garantizan el éxito como los errores que vos misma cometiste y pueden ser una luz para que otras personas puedan evitarlos. 
O al menos, saber que tienen que esperar cuando se equivocan.Porque seamos francas: mil veces sabemos que es lo que "no debemos hacer" y hasta no darnos la cabeza contra la pared... no paramos.
Al menos, esta desmesurada es un poco así: necesita la experiencia personal pero, me tranquiliza saber qué puedo esperar tanto si tengo éxito como si no lo tengo. No hay nada más desesperante que desconocer en qué te equivocaste.

5- Argumentar.

Este último paso lo dejo librado a tu criterio. No siempre argumentar es una necesidad en un producto digital. De todos modos, ofrecer una serie de puntos fundamentados por los cuales se debe actuar de determinada forma, o comprar ciertos materiales y no otros, puede ser de gran ayuda para muchos lectores.
La argumentación es parte del proceso de persuasión, por lo tanto, supone el desarrollo de los puntos que comprendemos racionalmente como valiosos para que quien lee nuestro trabajo logre el objetivo que se propuso: informarse, aprender, inspirarse, cambiar, etc.
Desde este punto de vista, argumentar es una buena idea para garantizar que el lector conoce cuál tiene que ser su participación para lograr el éxito. Así, evitamos crear falsas expectativas.
Por ejemplo: si estoy vendiendo un ebook sobre "cómo perder 10 kilos en 30 días", tendría que argumentar claramente que: 
- No todos los organismos reaccionan de la misma forma la tratamiento.- Solo con la dieta no funciona.- La secuencia, la frecuencia y la intensidad de los ejercicios es importante.
Cada uno de estos aspectos convenientemente argumentado le permite al lector comprender cuáles son las limitaciones del planteo si no cumple con su parte del proceso.

¿Preparada para escribir?

Realmente espero que las herramientas que te estoy ofreciendo en estos últimos días, te animen a escribir tu propio producto digital.
No lo pienses como el desafío de crear un best-seller sino como el reto de poner a prueba tu capacidad de perseverar para llegar al objetivo de tener un blog profesional del cual obtener ingresos.
Si aún querés saber más... no te preocupes. Podés unirte a la tribu desmesurada cickeando el botón rosa y seguir aprendiendo sobre storytelling, blogging y esas cosas que, por acá, nunca faltan.
Sí. Quiero más Storytelling