Como preparar el tiramisú italiano

Tiramisú italiano. El tiramisú es el postre más popular en Italia. Tiene la ventaja de estar preparado con antelación, no ocupándonos en el momento de la cena o comida. Es originario de Venecia, y su nombre significa literalmente “levántame”  (tira mi su).

INGREDIENTES

• 32 bizcochos de soletilla
• 2 tazas de capuchino
• 6 huevos
• 8 cucharadas de azúcar
• 500 gr. de mascarpone
• Cacao amargo en polvo

POR CADA RACIÓN

• Calorías: 515
• Proteínas: 11,8 gr.
• Hidratos: 40,7 gr.
• Grasas: 41,6 gr.

RACIONES

• 8

MÉTODO DE PREPARACIÓN

• Postre frío

TIEMPO DE PREPARACIÓN

• 45 min. (más varias horas de nevera)

  Partimos de 6 yemas de huevo. Les añadimos 8 cucharadas de azúcar, a ser posible molido o azúcar glass, pues se disolverá mejor al batir Batimos todo bien. Debe quedarnos una masa blanquecina y con relieve. Añadimos el mascarpone. Aquí podría usarse queso Philadelphia también, en caso de que no encontrásemos el mascarpone o este nos resulte demasiado graso. Aquí yo voy a emplear como líquido un simple capuchino. La receta original habla de un vino fuerte llamado marsala (difícil de encontrar), de licor de café….de brandy….Yo lo que noto con esos ingredientes es que toma un sabor demasiado fuerte para mi gusto. Por eso simplemente remojo los bizcochos en capuchino, para que tome un ligero sabor a café, pero sin pasarse. Pero bueno, eso a vuestra elección. Podéis usar una mezcla de café, licor de café y brandy. Le añadimos a la mezcla anterior unas 4 cucharadas de capuchino en mi caso. Mezclamos todo bien. Nos debe quedar totalmente integrado. Vamos a montar las claras con una pizca de sal, pues favorece el proceso. Lo de montar las claras con azúcar o sin él, depende de como las vayamos a usar. Como el postre ya lleva azúcar por si mismo, ahora no se lo echamos en las claras. Nos deben quedar a punto de nieve, de tal forma que, aunque volquemos el bol no se nos caigan. Incorporamos las claras montadas con cuidado, a la mezcla anterior. Con movimientos envolventes, para que no se nos bajen las claras, vamos incorporando todo. Nos debe quedar todo muy bien integrado. Yo voy a emplear un molde desmontable pues así se facilita mucho el corte de las partes y que queden bien. El tamaño es de unos 28×18 cm. por unos 6 cm. de alto, de ahí la cantidad de huevos y demás ingredientes que necesito. Si, por el contrario, usáis un molde típico de bizcochos, la cantidad de ingredientes a emplear ya sería la mitad, entonces. Para desmoldarlo mejor, sería bueno, en este caso, colocar la masa sobre un poco de papel de cocina, así sacaríamos mejor el tiramisú del molde. Como digo, en este postre es fundamental el poder cortarlo bien, pues la presencia final juega un papel muy importante aquí. Vamos remojando los bizcochos en la mezcla de café y brandy o, en mi caso, en el capuchino. No es necesario empaparlos hasta que estén completamente blandos, pues en la propia mezcla ya se irán ablandando. Yo empleé de estos que son más duros y se ablandaron igual al probar el postre. También se puede emplear otros formato de bizcocho de soletilla más anchos y blandos. Incluso hay quien emplea trozos de bizcocho “normal”, cortados longitudinalmente. Es cuestión de probar. Vamos cubriendo la base de nuestro molde con los bizcochos remojados de lo que será nuestro titamisú italiano. Los cubrimos con una primera capa de crema que extendemos por igual. Colocamos una segunda capa de bizcochos también remojados. Volvemos a cubrir de masa, hasta el tamaño final. Ahora llevamos a la nevera y lo dejaremos ahí unas horas, para que tome consistencia. Es buena idea hacer este postre de un día para otro, quedando así toda la noche en el frigorífico. Pasadas esas horas lo sacamos de la nevera. Facilita el desmoldado si pasamos previamente un cuchillo por todo el borde. Así nos queda tras sacarle el molde lateral. Si no usamos un molde desmontable, es igual, pero habrá que tener más cuidado a la hora de sacar las porciones del postre. Y aquí tenemos una porción que cortamos con mucho cuidado y sacamos con una paleta de las anchas, para no romper la porción. Lo espolvoreamos con un poco de cacao en polvo para postres (sin azúcar) y ya está. Ya tenemos listo nuestro tiramisú italiano. Es imprescindible espolvorear con cacao en el momento de servir, y no cuando va a la nevera, pues así el cacao estará firme y no húmedo. Buen provecho internautas ;-