Con SM y Alfaguara por fin despegan los libros electrónicos juveniles - Actualidad - Noticias del mundillo

Hace unos meses el futuro del libro electrónico (“ebook” para abreviar) se encontraba en la cuerda floja por eso de la desconfianza ante lo desconocido y un mercado que no se sentía preparado para el cambio, pero ahora son muchísimas y muy interesantes las propuestas que nos ofrecen las editoriales. Los primeros en modernizarse y pasarse a este nuevo formato fueron, por irónico que parezca, los clásicos de toda la vida, y ahora por fin la literatura juvenil es la que empieza a despegar con fuerza.

En España son varias las editoriales que han comenzado su andadura en el mundo virtual que nos ocupa, aunque en esta ocasión hablaremos sólo de Alfaguara y SM, porque presentan un catálogo de ebooks juveniles realmente atractivo.

La primera, tal vez con motivo de la llegada de las fiestas navideñas, nos presenta la saga Crepúsculo al completo, sin olvidarse de La segunda vida de Bree Tanner. Si sois fans acérrimos de la obra más internacional de Meyer, daos prisa en haceros con estos cuatro ebooks para hincarles el diente en vuestros lectores electrónicos.

En cuanto a SM: la editorial ha virtualizado buena parte de su catálogo infantil y juvenil. Para los más pequeños encontramos obritas como Lili, Libertad, Ojo de nube, En un lugar de atocha y Mi nombre es Skywalker. Mientras que en ebooks juveniles se han centrado en sus autores más queridos y han modernizado títulos como Los escarabajos vuelan al atardecer, las trilogías La Puerta Oscura y Memorias de Idhún, Malas tierras, El síndrome de Mozart o Cuentos crudos.

Si bien es cierto que todavía queda un largo camino por recorrer en el universo del libro electrónico, con semejantes apuestas literarias podemos quedarnos más tranquilos. Además, el potencial del ebook es el que es y a los libros de papel no les va a quedar más remedio que aprender a convivir con ese nuevo inquilino del mundo de las letras. Por eso, en lugar de enemigos, ¿por qué no convertirse en aliados? Siempre habrá lectores, y para gustos colores, después de todo. Eso sí, aunque se esté apostando por el libro electrónico, todavía queda superar la barrera más peliaguda, la económica, sobre todo si hablamos de los lectores electrónicos.