La carne de conejo es sana, sin grasa y con sabor sabiendo prepararla bien al fuego con cuidado ya que seca con mucha facilidad. La carne de mayor calidad se da en el conejo, de cuatro meses con un peso de 2 kg., que suponen 1,3 kg. al quitar la piel, extremidades y cabeza. Esta carne es blanca, tierna y jugosa. Posee un alto grado nutritivo y se digiere con facilidad.
Ingredientes:
Un conejo1/2 vaso de aceiteuna cebolla200 gr de jamón en daditosun ramo hecho de perejil, laurel y romero2 cucharadas de harinaun vaso de vino blanco4 dientes de ajo10 almendras2 clavos3 yemas de huevounas hebras de azafránun huevo duro para adornarsal y pimienta
Preparación:
En una sartén con aceite caliente doramos el conejo troceado. Una vez dorado lo ponemos en una cazuela.
En el mismo aceite freímos la cebolla picada, el jamón picado, los dos clavos y el ramo de las hiervas.
Cuando está el sofrito hecho añadimos las dos cuchadas de harina, le damos unas vueltas y echamos este sofrito a la cazuela. Añadimos el vino blanco, un majado hecho con los ajos, el azafrán y las almendras. Lo cubrimos de agua, lo dejamos cocer a fuego lento hasta que el conejo esté tierno.
Por último le añadimos las yemas de huevo batidas y apartamos la cazuela del fuego. Dejamos reposar unos minutos antes de servir.
Un buen vino tinto con cuerpo (reserva/crianza) marida muy bien con este plato.