La Dra. Holly Andersen, directora de educación y divulgación en el Instituto del Corazón en el NewYork Presbyterian Hospital / Weill Cornell Medical Center, advierte que el ejercicio durante el verano puede conducir a la deshidratación, el agotamiento, e incluso a un evento cardiaco.
La Dra. Andersen ofrece los siguientes consejos para quienes vayan a reanudar o comenzar una rutina de entrenamiento en la estación más cálida del año:
- Si hace demasiado calor entrene en un espacio fresco o con aire acondicionado.
Las temperaturas extremas pueden alterar la circulación, aumentar el trabajo de su corazón y hacer la respiración más difícil.
- Realice estiramientos. Incluso en el verano, nuestro cuerpo necesita entrar en calor para evitar lesiones. Recomiendo leer el articulo (consejos para reducir el estres)
- Beba mucho líquido. Es importante beber mucha agua, incluso antes de sentir sed. Si usted es propenso al mareo por presión arterial baja, es un atleta de resistencia o tiene más de 75 años de edad, es preciso que reponga electrolitos con bebidas rehidratantes.
- Trate de mantener su cuerpo a temperaturas constantes. No tome una ducha muy caliente o fría luego de hacer ejercicios ni ingrese a un sauna, ya que los cambios bruscos de temperatura pueden aumentar la carga de trabajo del corazón.
- Haga ejercicio al aire libre durante los momentos más fríos del día: temprano por la mañana o por la noche.
- Use protector solar porque las quemaduras reducen la capacidad de su cuerpo para enfriarse.
- Tome las cosas con calma. Comience su régimen de ejercicio lentamente e incluya pausas para descansar y beber líquidos.
- Diviértase recuerde que hacer ejercicio es dedicar tiempo para sí mismo.
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