Revista Psicología
Resulta que hay algo científico detrás de un ataque de risa. Una investigación de la Escuela Médica de Harvard ha determinado que la felicidad es contagiosa emocionalmente hasta tres grados –lo que significa que su buen humor no sólo puede propagarse a sus amigos, sino a los amigos de tus amigos y los amigos de esos amigos, también.
Este estudio pone de relieve una clara verdad:Una de las mejores maneras de ser feliz es hacer felices a los demás.
Una de las mejores maneras de hacer felices a los demás es siendo feliz mismo.
Hay una circularidad en esta verdad que puede confundir, hasta que lo entienda.
Por lo tanto, contrariamente a lo que mucha gente piense, el tratar de ser feliz no es una preocupación centrada en sí misma; las personas felices hacen felices a los demás. Las personas felices son también más proclives a ser voluntarios, donar dinero, tratar de ayudar a otras personas, de persistir en solucionar problemas, etc.
Así que ya lo saben: compartan una sonrisa ¡y lancen una epidemia de alegría!