Revista Cultura y Ocio
No te busco y te encuentro, Por que mi destino eres tu, No duermo y te sueño, Por que en todo lo que es la vida, en todo eso tu estas. Soy un hombre afortunado, Aveces bueno, aveces malo, Contigo un desalmado, Pero siempre, siempre, un hombre enamorado. El viento susurra tu nombre, Te escucho por doquier, El agua replica tu piel, Te siento toda en mi, El sol ilumina la belleza de la materia bajo la tierra de dios, entonces cesa mi ateísmo. Si existes tu, solo un divino pudo crearte, Y si es así, eres el regalo de un dios, Un presente al mas profano mortal, La muestra viva de la misericordia, el amor materializado, mi amor.