Al momento de escribir este post estamos a 1°C, hasta ahora según dicen en los telediarios, es el día más frío en toda España desde que comenzó el invierno. Después de llevar varios años viviendo en Madrid (con un clima bastante agradecido, pero con 4 estaciones marcadas), la percepción de lo que uno llamaba frío cambia, y con el paso de inviernos "uno se acostumbra" o al menos los lleva mejor. Siempre recuerdo mi primer invierno como el más duro de todos, aunque no estoy segura de que en realidad haya sido el más frío hasta ahora.
Cuando llega esta época del año, comienzo irremediablemente a preparar más platos de cuchara, como le llaman en España, aunque en mi caso, la casi ausencia de estaciones climáticas en Venezuela me acostumbró a poder comerme una crema, sopa o granos en julio o en diciembre, costumbre que sigo manteniendo, aunque aquí son platos que se comen exclusivamente entre otoño e invierno.
El plato de cuchara de hoy para pasar este frío es una crema de calabacín. Es una receta muy fácil de preparar y a la que además puedes agregar otros ingredientes según gustos. Además he utilizado como base un caldo de carne de una carne mechada, que le aporta muchísimo sabor, y sinceramente no necesita nada más.
Además es una receta que podrás congelar perfectamente y que dura un par de meses en el congelador sin problema.
- 700ml de caldo de carne o en su defecto, agua y un cubito de carne (knorr, Maggi...)
- 4 calabacines
- 1 rama de cebollín
- 1 diente de ajo
- 4 ajies dulce (en mi caso he usado pimientos dulces que es lo más parecido que he conseguido en Madrid)
- Sal al gusto en caso de requerirse
- Pelar los calabacines, lavar muy bien y cortar en trozos. Repetir el proceso con el resto de los ingredientes (cebollín, ají dulce, ajo)
- En una olla colocar el caldo de carne (o agua y cubito de carne) y cuando comience a hervir agregar todos los vegetales
- Cocinar alrededor de 40 minutos, pasado este tiempo, ajustar la sal en caso de ser necesario, dejar reposar hasta enfriar. Yo retiro el cebollín y los aji dulce, no me gusta licuarlos en la sopa, al menos no todo.
- Licuar los calabacines con el caldo. Verificar que el punto de sal esté correcto
- Servir muy caliente y agregar un chorrito de aceite de oliva.