Revista Cocina
Hace tiempo que una amiga me pidió la receta de la crema de calabaza, la tradicional por decirlo de alguna manera y he aprovechado que estamos en vísperas de Navidad para traerla y de paso darle un toque más especial, el que sin duda le aporta el jamón ibérico, la mejor manera para convertir esta crema, valga decirlo buenísima, en un plato de categoría para la cena navideña.
¿Estáis cansados de sopas de pollo y pavo, de mariscos, de consomés al Jerez, de las habituales de Nochebuena? Pues debéis probar con la que os enseño, no requiere de mucho tiempo para elaborarla, es fácil y delicada, estupenda para una noche más especial. Si los bolsillos andan un poco flojos un buen jamón blanco será un sustituto perfecto y si os lo podéis permitir un par de lonchitas de ibérico por plato no nos subirán demasiado el presupuesto.
Ingredientes (4-6 personas):
- Calabaza troceada (sin cáscaras ni semillas) 1k y 200 g.- Patata 1 grande,- Puerro 1.- Aceite de oliva 6 cdas.- Cubitos de caldo de carne 2.- Nata para cocinar 125 ml.- Pimienta blanca molida (al gusto).- Sal (si se necesita).- Lonchitas de ibérico (2 por plato).
Elaboración:
Sofreír en una cacerola el puerro limpio y cortado. Cuando haya ablandado ponemos la patata y la calabaza troceados parejos.
Después de cinco minutos moviendo el sofrito, cubrimos con agua sin excedernos, basta con que quede un par de dedos por encima.
Añadimos los cubitos (si preferís ponedlos de verdura). Dejamos que cueza a fuego medio hasta que se ablanden la calabaza y la patata.
Trituramos y colamos para que quede más fina. Comprobamos la sal (no suele ser necesaria) y ponemos, si nos gusta, la pimienta molida.
Antes de servirla y caliente aún, agregamos la nata y disolvemos, no conviene hervirla pues puede cortarse y nos estropearía su aspecto.
Servimos con dos lonchitas por persona.