Aunque sea verano, yo no desisto de comer legumbres. Son un alimento básico en la dieta de mi familia, lo único es que las preparo un poco más ligeras por esto del calor.
Realmente, hice unas lentejas con puerro y resulta que eran un poco ásperas, así que, decidí prepararlas de otra manera para evitar esos hollejos tan molestos.
El resultado salta a la vista: un plato delicioso como entrante que encantó a todos. El toque de curry te transporta a Oriente y la presentación en vasito es de lo más atractiva, ¿verdad?.
Prueba a hacerlas así y en casa seguro que te hacen la ola!!
Para 8 vasitos:
- 400 g de lentejas
- 2 puerros
- 1 cebolla pequeña o una cebolleta
- 1 envase de leche de coco (400 g)
- 1 cucharadita de curry
- aceite de oliva
- 1 diente de ajo
- 1 hoja de laurel
- sal
- sésamo negro para decorar
- cilantro fresco
Se ponen en una olla las lentejas (previamente remojadas unas horas) cubiertas con agua. Se añade el diente de ajo, la hoja de laurel y un puerro picado. Se salan y se llevan a ebullición.
Si las haces, como yo, en olla exprés esperas a que pite la válvula y cuentas 20 minutos de cocción. Si lo haces de forma tradicional, tendrás que cocerlas más tiempo, una hora, más o menos.
Se pone un poco de aceite de oliva en una sartén, se calienta a fuego no muy alto y se pocha el puerro restante y la cebolleta con una pizca de sal.
Cuando esté transparente el puerro, se incorpora la cucharadita de curry, se remueve un poco y se añade la leche de coco.
Se deja que dé un hervor y se rectifica de sal, si hace falta.
Se toman 8 cucharones de las lentejas, se pasan a una cazuela, se añade el contenido de la crema de curry y se bate enérgicamente con la batidora eléctrica.
Se sirve caliente, o templado, en vasitos espolvoreando con sésamo negro, cilantro fresco, lavado y picado y una pizca de curry.