A las puertas de la primavera los días son de lo más variable. Las temperaturas sufren grandes variaciones de un día a otro, a veces incluso en cuestión de horas, con lo que igual nos invitan a no colgar el abrigo que a ir despertando del letargo invernal a nuestras camisetas. Ya lo sé, ya ¿y qué tiene esto que ver con la Crema de Yogur y Anchoa?
Exactamente lo mismo. Y es que igual nos apetece una sopa bien calentita y reconfortante que algo más fresquito. Y hoy le ha tocado el turno a uno de mis Básicos, de esos a los que yo llamo “Fondo de Nevera” y que igual sirven de dip, que para untar unas tostadas o para acompañar un plato de pasta o una ensalada.
Normalmente este tipo de cremas se preparan con algún queso cremoso y nata líquida. En esta ocasión he utilizado el yogur griego y un buen aceite de oliva, de forma que no sé si le habré rebajado muchas calorías, yo no las cuento, pero lo que si estoy segura es que algo menos de colesterol si que tiene y un poco más saludable también.
¿Me cuentas con qué la acompañarías?
INGREDIENTES:
- 1 Yogur griego
- 60 cl. de Aceite de Oliva Virgen Extra
- 1 Latita de Anchoas (Aprox. 8 - 10 Anchoas pequeñas)
ELABORACIÓN:
- En el vaso de la batidora poner todos los ingredientes. Emulsionar/Batir hasta obtener una crema homogénea. Si queremos una textura más líquida, añadir más aceite.
- Guardar en un recipiente hermético.
Bon Appétit!