Crema de Zanahoria y Jengibre al Aroma de Tomillo limonero

No me gusta gustaba la zanahoria utilizada en exceso en una crema, pero esta Crema de Zanahoria y Jengibre al Aroma de Tomillo Limonero, me ha hecho rectificar.
El toque del Jengibre fresco y el par de ajos fritos, que bien podían haber sido tres,  hacen a esta crema adulta. Sí, no os riáis, he dicho adulta. No sé por qué, pero una crema de zanahorias, sin más, me resulta un plato de lo más infantil. Manías. ¡Con lo ricas que están crudas!

Como os decía, el resultado de añadirle algo de jengibre fresco y los ajos la convirtió en otra cosa, y el aroma del tomillo limonero, que me recomendaron en el puesto del mercado donde voy siempre, fue de lo más acertado.   
 
 
No sé si a vosotros os pasa, a mí muy a menudo. Con frecuencia los platos me recuerdan lugares donde he estado, y no siempre por qué sean platos típicos de allí.    ¿A qué me recordó esta crema? Mejor dicho ¿a dónde? ¿a qué momentos?  
 

Pues esta crema me recordó a África. No, no a África del norte, a África ecuatorial. De momento, mi memoria se teletransportó a las cenas que nos ofrecían en los lodges. Siempre había una sopa  o una crema al inicio, y cada cuál más rica. Todas de verduras, pero derrochando sabor. Ese sabor que hace que necesites volver a introducir la cuchara en el bol y llevártela a la boca para repetir la sensación. ¿Lo habéis saboreado alguna vez? Pues a ese me refiero.
 

Anda que no hace años de ese viaje. Si hago la cuenta casi que me da vértigo. Sin embargo, hay detalles, momentos, sensaciones, que no hemos olvidado y que vienen de tanto en tanto a nuestra memoria.  
 

Y mira por donde, esta crema va a quedar ligada a ese recuerdo viajero. Vamos que hasta me puedo imaginar a Meryl Streep y a Robert Redford allí, sentados en el porche, tomando esta crema en el almuerzo, mientras contemplaban las colinas del Ngong o los nudillos de Dios, como allí las conocen.    Le hago el comentario a Monsieur ÀTable, también conocido por vosotros como el "corremillas": "Esta crema me ha recordado a las que nos ofrecían en los lodges de Kenia", se me queda mirando y a modo de respuesta contesta, "Está muy rica. Tú es que a todo le encuentras relación".    Pues será eso. Que me gusta encontrarle relación a las cosas. Pero a las cosas que me gustan, a las cosas con las que disfruto, el resto acaban pérdidas en la memoria. Espero que no sea grave ;-)

Y con estas magníficas ramitas de Tomillo Limonero, os digo ¡Vamos a ver la receta!
 
CON THERMOMIX
INGREDIENTES:

• 500 gr. de Zanahorias
• 1 Cebolla Pequeña
• 10 gr. de Jengibre 
• 2 Dientes de Ajo  
• 70 ml./70 gr. de Vino Blanco
• 50 ml./50gr. de Aceite de Oliva Virgen Extra
• 700 ml./gr. de Agua (la cantidad depende de lo espesa que nos guste la crema)
• 25 gr. de Mantequilla
• 1 ó 2 Ramitas de Tomillo Limonero fresco
• Sal y pimienta

ELABORACIÓN:

1.  Pelar el trocito de jengibre, tiene que ser tierno, e introducirlo en el vaso. Añadir los dientes de ajo pelados y la cebolla a trozos. Picar, para ello programar 5 seg./Vel. 5. Bajar los restos de las paredes con ayuda de una espátula.
     
2. Añadir el aceite y programar 10 min./Tª 100ºC/Vel. 1. Mientras, pelar las zanahorias y cortarlas a trozos grandes.
     
3. Pasado el tiempo añadir la zanahoria y la mitad del agua. Triturar para que el tiempo de cocción sea menor, para ello programar 20 seg.Vel. progresiva 5-10.
     
4. Añadir el resto del agua, el vino, la mantequilla, la sal, unas hojitas del tomillo y un poquito de pimienta. Programar 25 min./Tª varoma/Vel. 2.
    
5. Transcurrido el tiempo, rectificar de agua y sal si fuera necesario, dejar que baje un poco la temperatura y obtener una crema muy fina programando 30seg/Vel. progresiva 5-10.
     
6.  Servir con unas hojitas de tomillo fresco espolvoreadas.
     Bon Appétit!