Revista Cine

Crítica de cine: Skyline

Publicado el 29 noviembre 2010 por Lapalomitamecanica
No miréis al cielo
Crítica de cine: Skyline
Nota: 1,5
Sumario
Lo mejor: Que no llega a la hora y media.Lo peor: El final. La forma más descarada de dar pie a una segunda parte que nadie quiere ver.
La suma: Independence Day + Cloverfield - un guión = SkylineFicha: Imdb.     Presupuesto/taquilla: Unos escasísimos 10 millones de dólares / lleva recaudados 30 en todo el mundo. El director: con una carrera envidiable en el mundo de los efectos especiales, los hermanos Strause continuan intentando que la audiencia se arranque los ojos tras saltar a la dirección con Alien Versus Predator 2.  El plan: fabricar un falso blockbuster con dos duros y un trailer espectacular. Misión cumplida.La curiosidad: los 3 protagonistas principales proceden de la televisión. Por un lado tenemos al Sargento Batista de Dexter, por otro al Crish de Scrubs y el último fue Milo en A Dos Metros Bajo Tierra.La duda: ¿Por qué nadie menciona las palabras "alienígena" "extraterrestre" o "marciano" durante toda la película?
El cielo se llena de mierda. Y no, ni sufrimos una invasión de palomas ni a al equipo de Sálvame la han salido alas. La invasión alienígena de la temporada acaba de desembarcar en los cines y aunque no ha conseguido cosechar demasiados cerebros (se estrenó en cuarto lugar en USA y no superará los 50 millones mundiales), tardaremos mucho tiempo en ventilar nuestro planeta del tufo a marciano rancio.
El argumento que nos presenta Skyline no serviría ni para un videojuego de recreativa. En teoría la función consiste en seguir a un grupo de colegas durante el primer ataque de unos alienígenas que buscan cerebros. Nadie se pregunta qué narices está pasando y las risas y los comentarios de chuloplaya dejan paso a los ceños fruncidos y pistolas que aparecen de la nada al activar el " modo acción".
Crítica de cine: Skyline
Pero nunca llega a pasar nada. Los personajes corretean de un lugar para otro sin dirigirse a ningún lado (literalmente no salen del mismo edificio)  y van muriendo sin darnos tiempo a aprendernos su nombre no sin antes regalarnos escenas tan ridículas como la del paracaidismo invertido con beso incluido. Para intentar crear algo de misterio tenemos una extraña luz que hipnotiza a los humanos y les oscurece las venas. Pero en ningún momento llegamos a saber si su función es convertir a las personas en extraterrestres o simplemente hacerles tatuajes tribales molones.
No es que ninguno de los protagonistas resulte minimamente interesante, es que ni la acción compensa el tremendo agujero negro que es Skyline. Los directores se han limitado a rodar unos gigantescos planos paisaje de naves sobre la ciudad y los han llenado de criaturas de todos los tamaños y formas. Una especie de parque de atracciones donde cada aparición marciana está perfectamente calculada como si dependiera de un resorte mal engrasado.
Crítica de cine: Skyline
Pero donde Skyline deja de ser solo una película aburrida y comienza a ser incoherente y absurda es en un tramo final donde directamente nada tiene sentido. SPOILER No se sabe como el protagonista es capaz de controlar a un alien con su cerebro recién arrancado del cuerpo. Y el brusco corte que da pie al final deja claro que no merece la pena perder el tiempo buscándole algo de lógica a la situación FIN SPOILER.
Este desastre tenía que tener truco por algún lado, y ese es su presupuesto. Skyline solo ha costado 10 millones de dólares. Una cantidad totalmente ridícula para una película que se basa única y exclusivamente en un festival de efectos especiales. Curiosamente ese es el aspecto más logrado de la cinta, pero como es lógico, no les ha sobrado para contratar actores competentes, un director de segunda unidad y un guionista. Eso si, espero que la mitad haya ido para el que montó el trailer.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

LOS COMENTARIOS (1)

Por  AvengersForever
publicado el 08 diciembre a las 18:43
Denunciar

Coincido compeltamente contigo. Vaya porquería. Menuda forma de perder 6 euros.

Saludos y ánimo