Algunas veces, cuando me viene a la mente la figura del maestro del suspense Alfred Hitchcock, me paro a pensar que cómo serían sus películas en el panorama cinematográfico actual, con todos los recursos que existen ahora, y que evidentemente en la época en la que el orondo cineasta británico paría obras maestras como "Psicosis" o "Los Pájaros" no disponían.Pienso que si Hitchcock viviera aun, sus películas se podrían asemejar por ejemplo a esta que vamos a comentar a continuación titulada "Stoker", que supone el debut en tierras estadounidenses del afamado director surcoreano Park Chan-Wook, conocido especialmente por ser responsable de la excelente y muy recomendable "trilogía de la venganza" con "Sympathy For Mr. Vengeance" (2002), "Oldboy" (2003), y "Sympathy For Lady Vengeance" (2005).Precisamente, la película que tenemos entre manos "Stoker", parte de un guión inspirado en el clásico de Hitchcock "La Sombra de una duda" (1943), en la que existen algunos paralelismos más que evidentes. También podemos decir que no solo se queda ahí, sino que se pueden vislumbrar a lo largo del metraje pinceladas de "Psicosis" (1960) y su famosa escena de la ducha o ese intimidante policía con gafas de sol tipo espejo; como también de "Frenesí" (1972) en el que se podría comparar la manera de quitarse y utilizar el cinturón de Matthew Goode con la célebre corbata de Robert Rusk; y otras menos evidentes como "La Trama" (1976) o "Recuerda" (1945), por citar algunas.

Fotogramas parecidos entre "Recuerda" de Hitchcock y "Stoker" de Park Chan-Wook.
Aparte de Hitckcock, otra de las inspiraciones que ha tenido Wentworth Miller (conocido por su personaje Michael Scofield de la serie "Prison Break") al escribir el estupendo guión de esta película ha sido Drácula de Bram Stoker, de ahí su título, y también esos personajes que más que personas, son como una especie de vampiros desangelados y siniestros.Pero no todo en este bello cuento gótico van a ser homenajes y referencias, también hay mucho del estilo del director surcoreano, que en su paso a tierras americanas, no ha renunciado para nada en su forma de hacer cine, aunque esta vez no esté cargado de tanta violencia explícita, dando protagonismo a esa impresionante puesta en escena, en la que cada plano rezuma una refinada poesía visual, y que enriquece la hipnótica y enrarecida atmósfera.


El encantador y enigmático tío Charlie.
Lo único que se le puede achacar a esta genialidad, es su ritmo un poco lento en su primer tercio, que hace que tarde un poco en arrancar la trama, pero es un mal menor.
Fuentes:
Imágenes cortesía de ©Fox Searchlight Pictures, Indian Paintbrush y Scott Free Productions.
https://www.image.net
http://www.elseptimoarte.net/peliculas/stoker-5232.html
http://www.filmaffinity.com/es/film266403.html
