
Este acto le pondrá en contra de las tríadas y, en concreto, de su antiguo compañero (Iko Uwais, The Raid), una máquina de matar que antes de entrar en acción, enviará a Ito y sus tres compañeros, todo tipo de matones, sicarios y personajes de la peor calaña, que pueda haber. Todos ellos armados hasta los dientes. Las escenas de acción son excelentes, con unas coreografías de artes marciales largas, exquisitas y perfectamente ensayadas y acabadas para deleite del público.

La película consiguió, para disfrute del público, grandes aplausos y gritos de placer, mientras la sangre corría a raudales por la pantalla y las escenas de acción conjuntadas perfectamente con su BSO transcurrían.
Si te gusta el cine de acción, es una película 100% acción, necesaria y fundamental para cualquier amante del cine de género. Es otro must de Sitges que no podéis dejar pasar. Sin duda la mejor película de acción del año.
Mi puntuación: 7/10
David Sanmartí
@ddsanmarti
Festival de Sitges 2018