Críticas: "Desafío Total" (Len Wiseman, 2012)

Título Original: Total Recall
Año: 2012. Duración: 115 minutos.
Nacionalidad: Estados Unidos.
Productora: Columbia Pictures / Original Film
Director: Len Wiseman.
Guión: Kurt Wimmer sobre el relato de Philip K. Dick.
Fotografía: Paul Cameron. Música: Harry Gregson-Williams.
Intérpretes: Colin Farrell, Kate Beckinsale, Jessica Biel, Bryan Cranston, Bill Nighy, John Cho, Bokeem Woodbine, Currie Graham, Brooks Darnell.

Desafío sin fuste
Termómetro Crítico:★☆☆☆☆
El remake convenientemente modernizado del gran clásico de principios de los 90 del mismo título dirigido por Paul Verhoeven, resulta ser, como muchos nos temíamos, un rollo macabeo insípido y abrumadoramente aburrido.
La fiesta de cabriolas y pirotecnia varia corre a cargo del director Len Wiseman  ("Underworld", "La Jungla 4.0") y el muchacho hace lo que puede, sobre todo en un buen par de escenas de acción en las que se nota que tiene mano.
Pero el problema fundamental no es suyo sino de un guión flojo y que convierte a la película en un blockbuster de acción en el que la peña se persigue, hay disparos, pirotecnia y poco más. Allá donde la original de Verhoeven adaptaba notablemente el relato corto de Philip K. Dick "Podemos recordarlo todo por usted" y le imprimía un ritmo y una historia que enganchaban, este remake se convierte en un batiburrillo de ideas sin ton ni son, con guiños al original, donde Colin Farrell hace de...bueno, de Colin Farrell y en el que te da exactamente igual si es Quaid, Hauser o le pegan un tiro a los veinte minutos de película.
En esta ocasión, Quaid (Colin Farrell) es un miserable obrero con unos sueños un tanto extraños que necesita cambiar de vida. Descubre entonces a la empresa Rekall, un sitio que ya de por sí no inspira confianza donde pueden implantarte unos recuerdos en la mente que te hacen creer que has vivido una auténtica aventura. Quaid elige ser un agente secreto y ahí es donde empieza su auténtica pesadilla. Descubrirá que en realidad es un experimentado agente contratado por Cohaagen (Bryan Cranston) para dar con Matthias (Bill Nighy) el líder de la resistencia. Pero pronto se le empiezan a mezclar sus identidades y empieza a dudar si en realidad es Quaid o Hauser y de si trabaja para Cohaagen o es un rebelde más.
Uno comienza a echar de menos el original nada más comenzar la película. Vale, de acuerdo. Hay una colonia, está la Resistencia, tenemos un núcleo. Vale, de acuerdo. También hay una tía con tres tetas. Pero poco más. Le falta la garra, la originalidad y la fuerza de la película a la que intenta versionar. Uno echa en falta al tito Arnold, a Ronnie Cox, a Michael Ironside, a Quato, suplantado aquí por un tal Matthias (¿¿??) y, por supuesto, uno echa en falta a Sharon Stone. Falta también la hiperviolencia del film de Verhoeven, ofreciéndonos en un su lugar unos cuantos tiroteos bien coreografiados pero insuficientes. Y claro, una historia que contenga los elementos del relato de K. Dick que aquí están ligeramente esbozados y se caen a los diez minutos como un castillo de naipes a favor de la acción y el espectáculo.

Lo mejor de la película, un aburrimiento notable lleno de persecuciones sin un objetivo concreto, viene siendo verle la a Jessica Biel y disfrutar de una Kate Beckinsale en plan malota repartiendo estopa. Con eso está todo dicho.