Es la terrorífica historia real de John Bunting, el asesino en serie más notorio de"Snowtown" y líder absoluto de un particular colectivo juvenil (y no tan juvenil) dedicado al crimen y responsable de más de 12 asesinatos en su pueblo y los alrededores allá por los 90. Tal y como suena, así de mal pinta (en el mejor sentido de la palabra) la desgarradora ópera prima de Justin Kurtzel, un particular 'profeta' en su tierra llamado a llenar de polémica y controversia las pantallas internacionales tras su reciente paso por la Semana de la Crítica del Festival de Cannes. En Donosti desde luego, nos ha dejado tiesos. Está, sin duda, entre la propuestas más duras vistas en el festival.
¿De qué va?
Cuando a Jamie, de dieciséis años de edad, le presentan un hombre carismático, se inicia una amistad. A medida que crece la relación entre ellos, crecen también las sospechas de Jamie, hasta que se da cuenta de que su mundo se ve amenazado tanto por la lealtad como por el temor que siente por su recién descubierta figura paterna: John Bunting, el asesino en serie más famoso de Australia.
¿Quién está detrás?
Si el pasado año David Michod fue el nombre de moda en tierra 'aussie,' este año, los honores se reservan para Justin Kurzel y su ópera prima "Snowtown," film que compitió este año en la Semana de la Crítica del Festival de Cine de Cannes, donde obtuvo una mención especial. El film también ha ganado el Premio del Público en el Festival de Cine de Adelaida. Anteriormente, Kurzel había dirigido el cortometraje Blue Tongue (2005).
¿Quién sale?
Lucas Pittaway, Daniel Henshaw y Louise Harris.
¿Qué es?
Animal Kingdom + Winter's Bone + Henry, retrato de un asesino.
¿Qué ofrece?
Un paisaje arisco y opresivo que no tiene nada que envidiar al palpado en "Winter's Bone," una disfuncional familia peor aún si cabe que la retratada en "Animal Kingdom" y unos atroces crímenes que directamente nos evocan a los vividos en "Henry, retrato de un asesino." Todo unido, mezclado y condimentado con un voraz uso de la camara, una lúgubre puesta en escena, una penetrante banda sonora y unas abrumadoras interpretaciones entre las que reluce Daniel Henshall en el papel de un psicópata que literalmente nos pone los pelos de punta. ¿Razones? Se tienen que descubrir y vivir por uno mismo, pero desde luego, esta es una película únicamente recomendable para estómagos fuertes."Snowtown" es una mirada tétrica, sórdida, que tiene alma de cine de autor dentro con un firme esqueleto noir que demuestra ser una potente combinación de ambas y que lo convierte en lo que verdaderamente es; un crudo, brutal y lúgubre dramón lleno de realismo social. Sin duda, está entre las propuestas más violentas, agresivas, extremas (y fascinantes) vistas en el festival.
Cuando a Jamie, de dieciséis años de edad, le presentan un hombre carismático, se inicia una amistad. A medida que crece la relación entre ellos, crecen también las sospechas de Jamie, hasta que se da cuenta de que su mundo se ve amenazado tanto por la lealtad como por el temor que siente por su recién descubierta figura paterna: John Bunting, el asesino en serie más famoso de Australia.
¿Quién está detrás?
Si el pasado año David Michod fue el nombre de moda en tierra 'aussie,' este año, los honores se reservan para Justin Kurzel y su ópera prima "Snowtown," film que compitió este año en la Semana de la Crítica del Festival de Cine de Cannes, donde obtuvo una mención especial. El film también ha ganado el Premio del Público en el Festival de Cine de Adelaida. Anteriormente, Kurzel había dirigido el cortometraje Blue Tongue (2005).
¿Quién sale?
Lucas Pittaway, Daniel Henshaw y Louise Harris.
¿Qué es?
Animal Kingdom + Winter's Bone + Henry, retrato de un asesino.
¿Qué ofrece?
Un paisaje arisco y opresivo que no tiene nada que envidiar al palpado en "Winter's Bone," una disfuncional familia peor aún si cabe que la retratada en "Animal Kingdom" y unos atroces crímenes que directamente nos evocan a los vividos en "Henry, retrato de un asesino." Todo unido, mezclado y condimentado con un voraz uso de la camara, una lúgubre puesta en escena, una penetrante banda sonora y unas abrumadoras interpretaciones entre las que reluce Daniel Henshall en el papel de un psicópata que literalmente nos pone los pelos de punta. ¿Razones? Se tienen que descubrir y vivir por uno mismo, pero desde luego, esta es una película únicamente recomendable para estómagos fuertes."Snowtown" es una mirada tétrica, sórdida, que tiene alma de cine de autor dentro con un firme esqueleto noir que demuestra ser una potente combinación de ambas y que lo convierte en lo que verdaderamente es; un crudo, brutal y lúgubre dramón lleno de realismo social. Sin duda, está entre las propuestas más violentas, agresivas, extremas (y fascinantes) vistas en el festival.