Crónica Donosti 2012: "Post Tenebras Lux" el diablo viste Reygadas

23 de Septiembre del 2012 | etiquetas: Festival de San Sebastián, Festivales 2012, Crítica Twittear

6 años después de alzarse con el Gran Premio del Jurado por "Luz Silenciosa", Carlos Reygadas se hacía con el premio al Mejor Director en el último Cannes con un film descrito como un cuadro expresionista por la pequeña razón de que ésta es una historia semiautobiográfica sobre los sentimientos, memorias, sueños, esperanzas y miedos del propio director, es decir, una película sobre la oscuridad que invade al mundo y al propio reygadas. No hay duda, sí Terrence Malick tocaba a Dios en "El árbol de la Vida", el director mexicano llega a Satán con su "Post Tenebras Lux".

¿De que va?

Juan y su joven familia urbana vive en una zona rural de México en la que disfrutan y sufren a partes iguales un mundo que entiende la vida de una forma diferente. Juan duda si estos dos mundos son complementarios o, en cambio, luchan inconscientemente para eliminarse uno a otro.

¿Quién está detrás?

Tres títulos fueron suficientes para ser (justamente) considerado uno de los principales referentes en el cine independiente contemporáneo. Un verdadero auteur que destacó gracias a la naturalidad y fisicidad de "Japón", a la contundencia y crudeza de "Batalla en el cielo" y a la sutileza y maestría de "Luz silenciosa".

¿Quién sale?

Los no profesionales Adolfo Jiménez Castro , Nathalia Acevedo y Williebaldo Torres además de sus hijas Eleazar y Rut Reygadas.

¿Qué puede ser?

"El Árbol de la Vida" de Carlos Reygadas

¿Qué ofrece?

Una de esas propuestas que en filmin tanto nos gustan, de esas destinadas a causar de todo, menos indiferencia, cuyo fascinante y cuidadoso dispositivo formal esconde un alma turbia, siniestra, cruel, e incluso, satánica, que, en un constante baile entre el más absoluto genio y el más extremo ridículo, me sumerge en un oscuro limbo de cuyo poderío sensorial no soy capaz de escapar pero tampoco llego nunca a abrazar del todo. Articulada a través del constante uso de un difuminado que humedece la imagen, un formato que rozaa un claustrofóbico 4:3 y una paleta cromática cuya precisa definición reinventa el uso del color, "Post Tenebras Lux" se erige en una obra formalmente tan portentosa como argumentalmente errática, cuya incendiara propuesta no tiene otro destino que quedar incrustada en mi retina. Buena señal.

Nota: 7.5 /10