Una receta italiana. Una forma diferente de comer croquetas. La clave está en hacer un buen risotto, dándole tiempo, sin que llegue a pegarse a fuego medio/lento.
INGREDIENTES:
- 240 gr. de arroz
- 1/2 cebolla
- 1/2 vaso de vino blanco (50 ml.)
- 25 gr. de queso parmesano rallado
- 10 gr. de mantequilla
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
- 1 vaso de tomate frito
- Queso rallado tipo mozarella
- Harina
- Huevo batido
- Pan rallado grueso
- Aceite para freírlas
Información nutricional por cada croqueta:
- Calorías: 60
- Proteínas: 1,9 gr.
- Hidratos: 8,2 gr.
- Grasas: 2,0 gr.
Raciones: 25
Método de preparación: Freír
Tiempo de preparación: 120 min.
Vamos a empezar por calentar la mantequilla, unos 10 gr., junto con las 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Mientras se derrite vamos picando la media cebolla. Añadimos la cebolla y la pochamos un poco, hasta que vaya tomando un color amarronado, pero sin quemarse. Añadimos el arroz y lo sofreímos un momento. Echamos el vino, medio vaso, unos 50 ml., removiendo bien para que se evapore el alcohol. Vamos ir echando el litro de agua por partes. Primero la mitad, cuando vaya casi todo consumida, 1/4 de litro y, finalmente, cuando casi se consuma este, el otro 1/4 final, siempre removiendo bien para que no se pegue. Lo vamos removiendo mientras se consume el líquido. Debe quedarnos bien seco, pero sin llegar a pegarse en el fondo de la cacerola. Añadimos un vaso de tomate frito. Como siempre, si es casero, mejor. 1/4 de un vaso de vino de queso parmesano, unos 25 gr., aunque en este paso, como siempre, queda al gusto de cada cual, pudiendo variar la cantidad si nos gusta con un sabor más fuerte a parmesano o menos. Mezclamos bien, salpimentando al gusto. Extendemos el arroz sobre una fuente y dejamos enfriar. Una vez frío, vamos ir haciendo bolas con las manos, que podemos untar con aceite para que no se nos pegue, o podemos hacer las las con dos cucharas, como en las croquetas normales. Hacemos un agujero pequeño con el mango de una cuchara de postre, e introducimos en su interior una porción de queso mozarella. Las bolas las vamos a pasar por harina, huevo y pan rallado, como las croquetas normales. Siempre sacudir el exceso de harina al pasarlas por ella. Recomiendo el pan rallado grueso. Vamos haciendo nuestras croquetas. Las vamos a freír en aceite a unos 180º C si tenemos freidora eléctrica. En una sartén tradicional, una forma de controlar esa temperatura es echar un poco de pan rallado, si se hunde hasta la mitad, y luego flota, es que ya está. Según se vayan friendo, las vamos sacando a un plato con papel absorbente. Y ya está. Ya tenemos nuestras croquetas de arroz rellenas de queso listas. Buen provecho internautas ;-)