Nos chiflan las croquetas!!! Todas y cada una de ellas, porque tal vez otra cosa no, pero versátiles son un rato. Estas las hace nuestra madre muy a menudo, o más bien siempre que vamos a casa, ya que siempre se las pedimos. Están tan buenas que se han convertido en nuestras favoritas. Además, todavía nos queda tiempo para disfrutar del aire libre, y como sientan unas croquetas cuando vamos de picnic o cuando llegamos a casa después de una mañana de playa ¿Verdad?
Estamos seguros de que todos sabéis hacer croquetas, pero por si hay algún despistadillo o es vuestra primera vez hoy os enseñamos a hacer croquetas, en este caso de huevo duro y jamón york ;) Os animáis a probarlas?
Croquetas de huevo duro y jamón york
⌇ Preparación: 30′ (+ enfriar y liar)
◷ Raciones: muchas!!
⥯ Dificultad: baja
Ingredientes
- 1 huevo duro
- 150 gr jamón york, a ser posible braseado
- 1/2 cebolla
- 6 cucharadas colmadas de harina
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- 1 litro de leche entera
- pan rallado
- 2-3 huevos
- aceite de oliva para freír
- sal
Receta
Empecemos con nuestras croquetas. Necesitamos una sartén grande donde pondremos el aceite a calentar. Añadimos la cebolla que habremos cortado bien pequeñita con una pizca de sal. Ponemos a fuego medio y pochamos.
Cuando la cebolla esté vamos a añadir la harina y con una cuchara la removeremos bien para que tanto el aceite como la cebolla la absorban. Estaremos unos minutos así para que la harina se cocine un poco.
Ahora es el momento de añadir la leche, mientras removemos veremos que la salsa va espesando, ya tenemos nuestra bechamel casi lista!! Añadimos sal.
Cuando haya espesado añadimos el huevo cocido y el jamón york, todo picadito, mezclamos. Tenemos que tener una salsa bastante espesa, pero tened en cuenta que una vez fría espesará aún más. Probamos el punto de sal por si hay que añadir más.
Si tenemos la textura que creemos correcta (las primeras tal vez no queden perfectas, es cuestión de hacer 2 o tres veces para pillarle el punto de espesor) vertemos la masa en una bandeja, dejamos enfriar a temperatura ambiente y después a la nevera tapada con film de cocina.
Ya está la masa fría, ahora debería ser manejable. Así que vamos a “liar” nuestras croquetas. Batimos un par de huevos en un plato, y en otro plato ponemos pan rallado.
Ahora ya sabemos como va, todos hemos visto a nuestras madres liar croquetas ¿Verdad? Con dos cucharas le damos forma a 3 o 4 croquetas, las que nos quepan en el plato de pan rayado que es por donde empezaremos. Con las manos las rebozamos y después de eso las pasamos al plato del huevo batido, las empapamos en el huevo y de nuevo al pan rayado para rebozarlas una vez más. Así tendrán dos capas de pan rayado, lo que las harán irrompibles!! Pues así hasta acabar la masa.
Ahora es el momento de congelarlas si así lo queremos. Sino a la sartén con aceite de oliva bien caliente o a la freidora. Es importante que el aceite esté muy muy caliente, así no se nos abrirán.
Pues listo, a disfrutar de las croquetas!!
Notas:
Con estas cantidades salen un montón de croquetas. Lo bueno de las croquetas es que las podemos congelar crudas y sacarlas en cualquier momento solo a falta de freír. Así que ya que nos ponemos merece la pena hacer una buena cantidad.
Podemos hacer croquetas de cualquier cosa, así que no dudéis en experimentar.
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