¿Cuánta comida tiramos a la basura?

De acuerdo con los datos facilitados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU),  España es el séptimo país europeo donde más comida se desperdicia. Cada semana, un tercio de los alimentos que compramos, acaba en la basura (1,3 kg de alimentos por hogar). Además, una parte de los alimentos que diariamente se tiran en los supermercados se encuentran en condiciones aptas para el consumo.

Tristram Stuart, escritor y activista inglés, ganó en 2011 The Sophie Prize con su obra Despilfarro. El escándalo global de la comida. En este ensayo denuncia que los países ricos desechan hasta la mitad de sus recursos alimentarios, mientras que, en los países en desarrollo, las pérdidas se deben a la carencia de infraestructuras básicas.  El problema no es por tanto la falta de alimentos, sino todo lo contrario: su despilfarro. Además, asegura que los 40 millones de toneladas de comida desperdiciada cada año en EEUU serían suficientes alimentar a los casi mil millones de personas que pasan hambre en todo el mundo.

A pesar de  las numerosas iniciativas en todo el mundo para luchar contra la pérdida y el desperdicio de alimentos, queda mucho por hacer.

Fuente: ethic.es (Las cifras del despilfarro alimentario)

En Europa desde 2015, casi 800.000 europeos han apoyado ya en la plataforma Change.org una campaña que reclama a la UE una directiva para que los supermercados no tiren comida en buen estado, sino que la donen a las ONG. Esta petición, iniciada por Arash Derambarsh (un concejal del municipio francés de Courbevoie), consiguió que en Francia se haya aprobado una ley que exige que los supermercados donen toda la comida sobrante en buen estado que no hayan conseguido vender.  También en Italia, una ley recién aprobada incentiva la donación.

De momento, el pasado mes de julio, el Parlamento Europeo votó una enmienda histórica sobre el despilfarro de comida. En ella invitaba a la Comisión Europea a que incentivara la creación, dentro de los 28 estados miembros de la UE, de acuerdos para que los supermercados donasen a ONGs la comida que les sobra. 

Veremos si es solo una recomendación de buena voluntad o si realmente se conseguirá reducir de manera significativa el despilfarro de comida.