Revista Arte

Cuenta atrás para Roma

Por Glo @GloRibas
La cuenta atrás para la escapada a Roma ya esta en plana marcha. El sábado por fin el día D, el día de llegar a la ciudad eterna, a la ciudad romana, a al ciudad renacentista, a al ciudad barroca… el día de disfrutar de sus calles, de sus rincones, de su historia y de sus historias…
Realmente no tenemos fijada una ruta por la ciudad pero el hecho que yo ya hubiera estado hace un tiempo tengo las cosas claras de que se puede ver y que cosas dejar en el tintero para una próxima vez.
Tengo ganas de ver ciertas cosas, cosas que pueden ser insignificantes para una persona que al igual no esté muy metida en el mundo de la historia del arte, cositas que puede pasar en cierto modo desapercibidas pero que para mi tienen un cierto encanto y que he ido descubriendo a través de las diferentes asignaturas de la universidad… una de estas “cositas insignificantes” es el Obelisco Sopra Minerva. Es una belleza de pieza…. No es muy conocida pero personalmente al verla en clase me enamoré de ella… no por nada en especial de su historia sino por lo “cuca” que llega a ser… un obelisco soportado encima del lomo de un elefante.
El Obelisco, de granito rojo, es el más pequeño que se encuentra en la ciudad de Roma con tan sólo 5.47 metros de altura. Sus caras son cubiertas de jeroglíficos. Se encontraba en la ciudad egipcia de Sais. Se encontró bajo el templo de Isis en el año 1665. Primeramente fue puesto en el claustro de la iglesia de Santa Maria Sopra Minerva pero dos años después el papa decidió cambiar el emplazamiento situándolo enfrente de la basílica. El elefante es de mármol blanco y se cree que el diseño de este pertenece a Bernini pero fue esculpido por Ercole Ferrata. La simbología del elefante se equipara a las virtudes que sustentaron la fe cristiana. Pero esta preciosa pieza paso de llamarse Elefantino a Il Porcino (el cerdito) porque la gente del pueblo le encontró más parecido a un cerdo que no a un paquidermo.
La localización no es que esté muy oculta en la ciudad, simplemente detrás del Panteón de Agripa así que solo quedará rodearlo para disfrutar del precioso Elefantino.
Hay otros emplazamientos típicos de la ciudad que ya visité pero tengo ganas de volverlos a ver y sobretodo verlos con la perspectiva de los años que han pasado de la vez anterior… tengo ganas de embobarme con la Fontana di Trevi y volverme a cuestionar como el gran genio del mármol pudo crear tal maravilla e intentar ponerme en la piel de quienes le rodeaban y entender como podían aguantar su fuerte personalidad y su poca simpatía por la gente que según él le podían hacer sombra (Evidentemente estoy hablando de Miguel Ángel).
Quiero descubrir en los Museos Vaticanos la Sala de Signatura y el fresco de La Escuela de Atenas, otro gran punto de interés en la visión renacentista de la filosofía y disfrutar del pequeño tributo de Rafael a Miguel Ángel.
Emocionarme de nuevo al ver la Capilla Sixtina… creo que me volverá a impresionar tanto o más que la primera vez que me topé con ella… y como no buscar a la belleza de la Sibila de Delfos que creo, bajo mi punto de vista, que de las sibilas representadas es la que tiene un encanto especial.
Alucinar con dos Caravaggios originales en la iglesia de Santa Maria del Populo y ver como la gente les pasa por delante y ni se da cuenta que están allí y tener un momento para mirarlos como si solo estuviéramos ellos y yo solos en la nave lateral de la iglesia.
Aunque sólo esté citando obras renacentistas también que tengo ganas de ver cosas del mundo clásico. Sobretodo tengo ganas de volverme a cuestionar y a no entender bajo ningún concepto como pudieron crear lo que crearon con los medios que tenían en aquella época. La gran estructura del panteón, la ingeniería del coliseo, la maravilla de los releves de la columna trajana, imaginarme la vida social de los romanos en su época paseando por las calles y hablando en el foro… son muchas de las cosas que se pueden llegar a pensar sobre la vida que llevaban aquella gente…
Pero bueno como podéis ver me tira más el siglo XV i XVI en la ciudad… supongo porqué ya tengo algo olvidado el tema clásico y el tema renacentista lo tengo algo más presente.
Antes de acabar me gustaría hacer referencia a una gran película rodada en la ciudad, una película que me encanta y que la he visto en más de una ocasión y siempre que lo hago me quedo aun más enamorada de la ciudad y de su historia. No podía ser otra que “Vacaciones en Roma” de Willyam Wyler y protagonizada por la Gran Audrey Hepburn y Gregory Peck. Creo que estos días puedo sentirme como ella descubriendo la ciudad milímetro a milímetro pero eso si, sin la ayuda de una Vespa Piaggio.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revistas