Revista Religión
Cuidado con los romances en la redNo sé exactamente a qué persona en específico me estoy dirigiendo. Pero ten cuidado de a quién le entregas tu corazón. Porque tú corazón no es cualquier cosa. Porque en él se anidan pensamientos, emociones y sentimientos. Porque ahí se esconde tú esencia verdadera y todo lo que eres realmente. A veces por soledad, otras por entretenimiento, las personas se absuelven en el Internet.
Y comienzan a charlar y lo que muchas veces comienza como una plática termina en relaciones peligrosas.
Porque mucha gente idealiza y construye castillos sobre arenas. Con esto no quiero generalizar y decir que todas las relaciones de amistad o noviazgo por Internet sean malas. Pero cuídate de entregar tu corazón a alguien falso(a) que no conoces.
Yo entiendo que uno puede conocer personalmente a una persona y si se toma el tiempo de compartir viéndose, conversando, saliendo, etc., puede surgir algo hermoso. Pero cuando uno decide formalizar una relación creyendo conocer a una persona que en realidad conoce muy poco, esto más adelante podría traer problemas.
Porque solo conoces lo que te ha dicho o querido mostrar esa persona o por lo que tú crees conocer. Entonces tenemos que considerar que el corazón suele ser engañoso en diversas ocasiones. No se puede amar lo que no se conoce, porque en la cotidianidad de esos momentos que compartes con una persona es que se va proliferando y aumentando el amor.
He escuchando tantas historias de matrimonios rotos porque una de las parejas se ha “enamorado” virtualmente. Porque andan buscando por la red lo que muchas veces no encuentran dentro de sus hogares. Porque viven matrimonios de apariencia, pero sus relaciones se han convertido en hielo o nieve. Porque necesitan que una nueva primavera llegue a sus matrimonios que parece que están pasando por el ocaso.
Y es triste ver no solo matrimonios rotos, sino hogares completos destruidos. Y yo me pregunto si realmente, ¿vale la pena perder tanto por tan poco? Podría decir tantas cosas, pero me limitaré a decirle a las personas solteras que tengan cuidado con quien comprometen su corazón y a las personas casadas, por favor, no cedan a la tentación ni se metan en líos.Ustedes mis queridos amigos y amigas no son cualquier cosa. El Creador se ha tomado tiempo en diseñarlos. Cuántas pruebas has tenido que pasar y trabajos para llegar a ser quien eres hoy día.
Por tanto mereces a alguien que te ame, te respete, te valore y con quien puedas tener una vida plena. Porque aunque hoy día hay muchos divorcios, se supone que cuando uno toma la decisión de casarse, lo hace pensando en que será para toda la vida. Porque uno anhela compartir y envejecer con ese ser amado.
Por eso es necesario que entiendas que escoger a la persona con la que vas a compartir el resto de tu vida es una de las decisiones más importantes que tomarás en la vida. Y si un día tú escogiste a alguien para compartir en tu vida, no la engañes ni la deseches de esa manera. Valora lo que tienes no vaya a ser que cometas un grave error y después sea muy tarde para remediarlo.
Dejo en sus conciencias esta palabra para que la mediten, la analicen, examinen sus vidas y lleguen a sus propias conclusiones.
Autora: Brendaliz Avilés.
Fuentes: Aliento Diario