Inflorescencia de Afelandra
Cuidados
Necesita iluminación elevada, pero sin que el sol incida directamente sobre ella.
El sustrato debe tener un buen drenaje y estar formado por partes iguales de mantillo, turba y arena.
El riego será abundante en verano, sobre todo en el ciclo de flor, y moderado en invierno. Puede, y esto es muy beneficioso, aumentarse la humedad ambiental por medio de pulverizaciones frecuentes. Los abonos, que serán bajos en nitrógeno y ricos en fósforo, las bajas dosis de nitrógeno se encaminan a evitar que la planta crezca rápido y pierda sus hojas inferiores, se realizarán cada quince días en primavera y verano.
Debido a lo compactas que son estas especies y el grado de humedad que necesitan, son frecuentes los ataques de insectos y otros parásitos, como el pulgón verde y las cochinillas. Por esta causa se recomienda la aplicación de tratamientos preventivos, consistentes en escuetas pulverizaciones con insecticidas, una vez al mes.
Inflorescencia de Afelandra
Multiplicación
En primavera se cortan esquejes de tallo y se ponen a enraizar en una mezcla de arena y turba a temperatura y humedad altas.