Es más, como veréis si seguís leyendo la receta hasta el final, los muffins de carne son a su vez, como el típico coulant o postre de muerte por chocolate, porque al cortarlos para comer, se vierte la salsa que tienen dentro, para goce y sorpresa del comensal. ¿Queréis saber cómo se hacen?
La idea de estos cupcakes trampantojo me ha llevado un tiempo de ensayos, hasta que he conseguido que salgan a mi gusto, y surgió cuando la empresa barcelonesa Xarcuteries Margarit, me envió publicidad de un producto que llamaban Carncake (me encanta el nombre) y me invitaron a probarlo. El carncake que ellos hacen, con distintos sabores de salsas, tiene formato de coulant, y al abrirlo sale su relleno de salsa de espinacas y piñones, pimientos, boletus y otros sabores. Por problemas de fechas, los calores del verano etc, no pudieron enviármelo, pero yo me quedé con el antojo, así que les dije que hasta que me llegara el suyo, yo intentaría hacer mi versión que he preparado con la carne picada de Carne Villa María, y que ahora os presento. Para terminar de conseguir el efecto cupcake, yo quería hacer un copete, pero a diferencia de los dulces, con esa pasta de mantequilla azucarada, lo preparé con un puré de patata algo espeso y con la manga hice la simulación. Espero que os gusten. Ingredientes para 6 cupcakes Para la carne aliñada: 400 gr de carne picada de ternera, especias a vuestro gusto (yo usé especias cajún), un huevo, 2 cucharadas de pan rallado, un chorro de ajopere. Para el copete: Puré de patatas casero (2 patatas hermosas, un chorro de leche entera y 1 pegote de mantequilla.) También puedes usar puré Maggi o similar. Para la salsa interior: En esta ocasión, tenía un bote de salsa típica de carne al horno, la que sale al hacer redondo, espaldilla, roastbeef, etc, con cebolla, zanahoria y caldo de carne, y los jugos del asado. Esa salsa reducida en un cazo y triturada, siempre viene bien. Yo siempre hago un poco de más, para tener un frasco lleno en el congelador, para enriquecer cualquier plato. Cómo hacer cupcakes trampantojo de carne Comenzamos con la salsa, que distribuiremos en una hielera, para tener congelados cubitos para conseguir el efecto coulant al abrir nuestros pasteles de carne. Repartimos bien en la hielera y al congelador. Los que sobren (solo vamos a usar 6) nos valen para otra vez, o para dosificar la salsa que queramos añadir a guisos, estofados, arroces, etc. Mientras precalentamos el horno a 190º, preparamos la carne, mezclando en un bol la carne picada con el pan rallado, las especias y el huevo. Hay que trabajar la mezcla como si estuviéramos haciendo pasta para albóndigas, y la mejor manera es trabajarla con las manos hasta que toda la carne está bien mezclada con el resto de ingredientes. En un molde de tipo muffins, magdalenas etc, colocamos un pegote de la mezcla de carne y ahuecamos el centro para que nos quepa un hielo de salsa congelada, tapándolo con otro poco de carne. Yo usé un molde de silicona de la marca Pyrex, que hace unos pasteles de tamaño pequeño, pero podéis usar cualquiera que tengáis. El proceso de cocción en el horno tiene dos partes. Una primera, ahora mismo, al hacerlos, en la que lo que queremos es que se hagan los cupcakes de carne, pero no demasiado. Lo justo para que la parte exterior esté bien hecha y sellada pero sin que llegue a derretirse la salsa, al menos no del todo. Fijaros en la foto siguiente para ver el momento de sacarlos del horno cuando empieza a salir. Luego habrá una segunda cocción en el momento de servir, en la que la carne se terminará de hacer, y que haremos con un toque de microondas, para que el comensal encuentre en su punto la carne y la salsa se derrita y salga como el chocolate fundido en los coulant. Encontrar ese punto de tiempos es lo más complicado, y además depende de cada horno. Yo hice la carne en el horno convencional durante 15 minutos, y cuando la salsa empezaba a derretirse y a rezumar por encima de los muffins, como en la foto, lo apagué y los saqué del horno. Por fuera están bien hechos, pero por dentro, en el corazón, estaban aún poco hechos, para terminar de hacerse, con el segundo calentón, cuando llegase la hora de comer. Tras desmoldarlos los dejé enfriar y ya estaban listos para guardar, congelar, o para comer, solamente faltaba el copete de puré y calentarlos en el microondas para el efecto coulant. En el microondas, 1 minuto a 900W es suficiente para que estén bien calientes, por dentro y por fuera, y para que se produzca el efecto de la salsa saliendo fundida al abrirlos. Antes de meterlos al microondas, les ponemos la cápsula de magdalena para terminar de completar el efecto cupcake. Mientras se calientan los cupcakes trampantojo en el microondas, metemos el puré de patata en la manga pastelera y según salen calentitos, les ponemos su copete de patata y los llevamos a la mesa.Además, una vez terminados, aguantan muy bien en la nevera unos 3 días, por lo que pueden ser excelentes para cenas, (y re-cenas), aperitivos, o para ocasiones en los que no sepamos qué comer. Están tan ricos que siempre os vendrán bien. Para una ración, yo pondría dos, como ya llevan puré, con una guarnición de ensaladita ligera tendréis suficiente. Para picoteo o aperitivo, uno está muy bien, para tomar con una cerveza, o con una copa de vino. Seguro que os gustan, animaos a probar los capcakes trampantojo de carne, son entretenidos, divertidos, y sobre todo, están buenísimos. Y cuando los de Margarit me envíen los suyos, ya os contaré qué diferencias encuentro y qué trucos aprendo. Hasta entonces, como digo siempre, Sed felices,