Desarrollo
El algodón no engaña; choni y guarra
Canis y chonis de toda España entran sin saber lo que les esperaba.Los llevaron a una sala de actos donde el director y los profesores les dieron la brasa. Luego echaron a los padres y empezó la tortura.
Tras quitarles todos los objetos y obligarles a poner un uniforme ridículo, les hicieron quitar los kilos y kilos que llevaban de maquillaje. Más tarde los llevaron sin decir dónde, como quien lleva a unos judíos a la cámara de gas, a la peluquería. Tras los lloriqueos, pataletas y demás, los alumnos fueron trasquilados como ovejas. Pero estaba algo aun peor por pasarles... ¡les obligaron a hacer la cama!. Y chonicientas veces, ya que las hacían mal y les mandaban a hacerlas otra vez. Y aun peor... les obligaron a comer lentejas. Mientras por la puerta se iba el mariconazo que se negó a cortarse el pelo, por allí entró uno menos maricón, Alejandro. Vino con su osito de peluche, que al arrebatárselo lloró desconsoladamente en la cama. El primer día de clase demostraron ser unos desechos de la ESO. Unos mono subnormales tienen más conocimientos que ellos. En la clase de música intentaron cantar, pero desde fuera seguro que parecía que estaban torturando a unos gatitos echándole agua hirviendo encima. La primera noche en vez de irse a dormir la mona comenzaron a hacer el idiota. A ellas les castigaron limpiando el suelo y a ellos a hacer flexiones. Al día siguiente les despertaron a ella haciendo ejercicios y a ellos... más flexiones todavía.
La gripe
Ahora sabemos como se vivía en el 63...
y nos está pareciendo una mierda
En este episodio estaban más o menos adiestrados, aunque fueron incapaces de no maquillarse y echarse gomina. Al llegar uno nuevo (Kiko) por el folla-gallinas que contagió a varios la Gripe A, no puso tantos reparos por el corte de pelo. Mientras tanto, Héctor hacía un cursillo extra de ebanistería, esculpiendo en el pupitre. Gracias a él todos fueron castigados sin excursión y encerrados en las aulas.
Doña Alicia aprovechó que estaban ahí encerrados para hacer terapia de grupo con los chicos, los cuales se desahogaron. Hubo tantos lloros y lágrimas que casi tuvieron que evacuar por inundación. Una vez llorado, hubo un motín de sujetadores, ya que a las chicas no les gustaban los del colegio que eran poco sexys. Joshua se puso chulito con Don Luis y no solo quiso echarle, si no que le dio un golpe bajo con su ahijado al que tanto quería. Por la noche se desahogó hablando con Ildebrando, el guarda nocturno.
Mientras los chicos se daban abrazos y consuelo las chicas estaban de juerga otra vez. Y otra vez les tocó limpiar la clase... o lo que sea que se supone que estaban haciendo. Al día siguiente Laura lloró el doble de lo que lloraron todos en la terapia de grupo. Para colmo ni ella sabía porqué lloraba. Al día siguiente Gema tuvo tortilla para desayunar, almozar y para cenar. Hasta que se la comiera o se desintegrase por sí sola. Luego les dejaron escribir una carta a sus familiares... y más lloros. Para la visita del delegado del gobierno de educación se prepararon para hacer unos una interpretación del himno, otros redactaron el discurso y otros a limpiar el patio.
Aroa que estuvo enferma varios días, se sentía sola y contagió a todos sus compañeros la gripe. Los que aun no estaban enfermos aprovecharon para robar chorizo. Por la noche el guarda nocturno les pilló el arsenal que tenían los chicos en el falso techo. Les castigó a pelar patatas, cosa que ellos se negaron. Empezó una rebelión, aunque el primero en caer fue el mariquita, ya que se estaba meando. Luego se unió al Papatagate, es decir, mantenerse despierto toda la noche pero sin pelar patatas. Ildebrando aplacó la rebelión
Clases de baile y un guateque
¡Fiestaaaa y que les den a los enfermos!
El delegado de nosequé iba a inspeccionar el colegio y los que no estaban con mocos en la cama estaban haciendo los preparativos. Cuando vieron el despliege de comida y bebida para el acto solo les faltó llorar. Finalmnete el delegado de gobierno no fue y les recompesaron por el esfuerzo con un baile y un guateque. El director les hizo elegir entre hacerlo ese día o esperar a que se recuperaran los compañeros que estaban con mocos en la cama. Increiblemente decidieron esperar y en vez de comer y beber les hicieron comer ajo porque era bueno para la gripe o algo así. Tal como les quedaría el aliento no se le acercará ningún virus ni vampiro ni persona normal.
Tras el partido de voleibol, hubo una merienda/cotilleo en donde los chicos y las chicas comezaron a tirarse los trastos. Luego cambiaron de opinión sobre el guateque y se pasaron por el forro a los compañeros enfermos. Para ello les dieron la ropa de guateque, es decir, ropa que les sobró al circo del sol y se la donó al centro, porque no podía ser más horrible. Todos se lo tomaron más o menos bien excepto Ana Julia, que se puso a patalear como una niña.
Tras esta crisis, empezó el guateque y se abalanzaron sobre los refrescos. Luego bailaron o algo así y jugaron a verdad, beso o atrevimiento. El caso es que se pusieron un poco cachondos y tras la fiesta hubo tocamientos indecorosos. Y está claro, les pillaron y en consecuencia fueron castigados. Luego se desmadraron del todo y Don Luis pilló a Joshua y Mario robando vino. El castigo, pelar media tonelada de patatas. El castigo de Joshua y Mario, los autores materiales del robo fue recoger el naufragio del día anterior, es decir, el guataque.
Usaron la clase de retórica para desahogarse y hablar sobre las injusticias del centro. En clase de biología intentaron diseccionar una rana y casi se mueren del asco. En un acto de mala leche, les dieron de cenar ancas de rana y Ana Julia se puso a llorar otra vez.
Durante la inspección de Doña Alicia, aparte de descubrir a
Visita de los padres
Durante el rodaje de este reality no se maltrató
ninguna cama.
Bueno, está se lo ganó
Comenzó una nueva jornada y la primera rebelión. Esta vez fue Mario por un vaso de leche que estaba tibio. Gracias a él todos se quedaron sin desayunar.
En el reparto de papeles le tocó el papel de león a Alejandro, y él más feliz que una perdiz. Igual que Carmen en su papel de Dorothy. Héctor se mosqueó porque no le dieron ningún papel. Gema también se cabreó por lo mismo y eso que le hacía más ilusión que a ninguna. Para rematar, les dieron de comer sesos de conejo y claro, Gema ni los tocó.
Durante los ensayos de la obra una vez más atacaron a Alejandro por su condición de gay, esta vez fue Joshua. La discusión continuó en el dormitorio y resulto herida una cama. En el patio Gema por fin se comió los sesos. El público asistente lo celebró con un gran aplauso.
Luego hubo un ensayo de la obra y hasta unos niños de preescolar lo hubiesen hecho mejor. En la comida recibieron cartas de sus familiares y cuando las leyeron en sus cuartos hubo sesión de lloriqueos. Por la noche otra vez fueron incapaces de dormir calladitos. En vez de eso se dedicaron a pintarse el culo con rotulador y como Ildebrando no tenía mucho sentido del humor, les tocó hacer ejercicio
Al día siguiente terminó la cuarentena y en la clase los chicos tuvieron que hacer una redacción definiéndose. Evidentemente cuando leyó Héctor la suya, hubo sobredosis de prepotencia, egocentrismo y sobrebia. En general, las clases se le atragantaron, sobretodo el latín. Durante la comida exigieron a Doña Alicia pidiera perdón por haberlas cuidado cuando estaban enfermas. Se revelaron Silvia e Inma, pero estas se cabrearon porque las demás no las apoyaron. En clase de gimnasia hubo una especie de olimpiadas escolares que no es que tuviera mucha historia.
Antes de estrenar la obra de teatro descubrieron que el público iban a ser sus familiares y se pusieron a llorar. Tras aguantar la obra de teatro, los familiares pudieron reunirse con ellos y ponerse hasta las botas comiendo. Después de esto, Inma se tranquilizó con sus compañeras y tras eso estuvo Happy day total. Pero llegó de nuevo la rutina y a comer la mierda nuestra de cada día. Los profesores procedieron a buscar los objetos prohibidos que le entregaron sus familias, cosa nada extraña, ya que habían confesado tenerlas ante la cámara.
La expulsión de los chicos
Héctor, dirigiendo la limpieza
Tras la visita de los padres parece que a parte de alegrarse y esas cosas los chicos se desmadraron. Esta vez fue el profesor de gimnasia quien les despertó con la campanilla. El motivo fue que si limpiaban la habitación iban a la piscina. Los chicos se lo tomaron normal, pero las chicas casi montan una fiesta. Y claro, como era una cosa en equipo el primero en dar la nota fue Héctor, que limpió su parte y se acostó en la cama. En consecuencia se quedó sin ir a la piscina como castigo y en una extraña muestra de absurda solidaridad, el resto decidió no ir.
Venga, que aun no la hemos cagado lo suficiente
Mientras tanto, las chicas trataron de depilarse la selva que tenían en los pies, pero Don Carl frustó la operación. Durante la comida Silvia trató de cambiar su castigo de arresto domiciliario del capítulo anterior por otro para poder ir a la piscina. El cambio fue a peor, ya que le tocó limpiar los baños de los chicos y chicas. Mientras las chicas se probaban los horribles bañadores del 63, a Silvia le surgieron las dudas de lo de limpiar el baño. Sobretodo cuando le tocó limpiar el de los chicos, que casi tuvo que llamar a los espeólogos. Poco a poco fue dislumbrándose que el simple hecho de ir a una piscina acabó en la división del grupo. Vamos, que ni para un momento de ocio no paraban de cagarla. Durante el baño en la piscina al que fueron las chicas y algunos desertores de los chicos todos nadaron... lo de Iván aun hoy no se sabe qué estilo era. En el aula, los castigados echaban sapos por la boca y de paso robaban comida. Cuando llegaron los compañeros de la piscina empezaron los reproches, mientras Héctor veía la escena como mirada aviesa.
Llegó el momento en que se descubrió el robo del chorizo, del cual solo confesaron Iván y Aroa. Pero si por si eso fuera poco, aprovechando que estaba Don José el profe blando, decidieron profanar el cuadro del fundador del San Severo dibujándole unos cuernos. Alberto decidió borrarlos, pero luego le dieron la vuelta a todos los cuadros. Al fundador del centro lo pusieron boca abajo como a Felipe V. Mientras tanto las chicas se lo pasaba pipa de sarao en la clase. Vamos, que el desmadre fue generalizado. La cosa acabó con la expulsión de los autores materiales de la profanación, aunque ellos no se creían que estaban expulsados. En vez de eso, armaron tal juerga y jaleo que en el piso de abajo hubo desprendimiento de techo Ni siquiera cuando les dieron las maletas se lo creyeron, pero luego se vieron en la calle y empezaron los lloros. Las chicas se lo tomaron igual de mal, sobretodo Ana Julia que rompió en lloros, bueno la verdad es que lloraba por todo.
Fin de curso
Tras la rebelión por fin dejaron que se despidieran las chicas de los chicos, aunque más que expulsados parecía que los iban a mandar a la cámara de gas dado el dramatismo. Al día siguiente ya sin chicos el San Severo parecía un entierro. Inma era la que más cabreada estaba, incluso trató de dar la vuelta al cuadro del fundador. En vez de expulsarla fue condenada a estar sola en un aula en silencio. Mientras las demás dieron clases de botánica, que no se sabe muy bien si era peor. El caso es que estaba la cosa tan mal que hubo terapia de grupo con Doña Alicia que acabó en mucho lloro y abrazo colectivo. Al día siguiente se conmovieron tanto que les dejaron reunirse con los chicos y les cantaron su particular versión del himno del San Severo. Luego les llevaron al salón de actos donde les entregaronProfesores
- Vicente Pastor: Director del colegio.
- Alicia Flon: La Señorita Rottenmeier cañi. Probablemente más de uno habrá soñado con meterle su campanilla mañanera por donde la espalda pierde su nombre.
- Luis Dopazo: Profesor con una especie de cosa por debajo de la nariz que algunos dicen es un bigote. Era el que más les castigaba y parecía disfrutar con ello.
- José Carmona: Profesor de música que era tan blando que los alumnos se aprovechaban.
- Julia Gallardo: Fue la que tuvo que aguantar la ira de Inma tras la expulsión de los chicos.
- Carl Dobson: Se suponía que iba a ser algo así como El Sargento de Artillería Hartman, pero quedó en poca cosa. Como mucho el castigo sin piscina a Héctor.
- Ildebrando Rodríguez: Guarda nocturno y director regional de pelar patatas.
Alumnos
Chicas
Marta invirtió en silicona lo que ganó
y lo recuperó en Interviu
- Claudia Moltó: Se dedicó a tomarse en serio la cosa y no hizo mucho jaleo. Fue a la universidad y se sacó una carrera que no conseguimos descifrar. Algo de ingeniería.
- Aroa Ortega: Su máxima aportación fueron las bacterias de la gripe que generosamente fue repartiendo a sus compañeros. Actualmente trabaja de redactora en la radio.
- Gemma Seco: Niña caprichosa que no le gustaba comer nada y que siempre menea la cabeza de alante hacia atrás antes de llorar. Rechazó comer tortilla y la tuvo de desayuno, almuerzo y cena. Tampoco se comió los sesos de conejo. Y así todo el rato. Al salir ganó un concurso de fotografia y hoy en día es cajera y reponedora de supermercado.
Ana Julia mandó a tomar por saco los estudios
y fue a lo fácil; ser modelo
- Deseada Amores: Una niñata verdulera y gritona. Cuando Doña Alicia le pidió un castigo para su compañera dijo que era incapaz de ello, pero cuando le dijo que en ese caso ella también sería castigada un segundo después le impuso limpiar el baño. Al final, cuando terminó el concurso cuando le dieron el móvil parecía que le habían resucitado un muerto y lo agarraba arrasada en lágrimas. Acabó de dependienta en El corte inglés. Hoy en día vive alquilando muebles o algo así.
- Inma Norte: Choni mal hablada que de cada tres palabras cuatro son palabrotas y la otra son referencias a su coño. La cuarentena le sintió fatal y volvió de mala uva. No se tranquilizó hasta la visita de los familiares. Luego le volvió la ira cuando expulsaron a los chicos. Salió graduada del centro sin haber aprendido nada. Seguía igual de chula que siempre. Incluso dio la impresión que la profesora se tuvo que contener para no ponerle por sombrero el cuadro del tal Saturnino cuando intentó darle la vuelta para que la expulsaran.
- Marta Ríos: Rubia de bote conocida gracias a su mítico tanga. Por alguna extraña razón le ponía el chichi calderilla el clon de Mesut Özil, osea David. Tiempo después de salir
decidió buscarse un trabajo horadoposó desnuda en la revista Interviú y si la hubiese visto Doña Alicia le hubiese dado un patatús. Después dijo que iba a acabar la Eso...
- Ana Julia Jiménez: Jirafa que habla como si tuviera papas en la boca o hubiese aspirado helio. Tras este programa participó en el programa Guaypaut!. Entró en el internado trabajando de modelo y se dio cuenta de que debía continuar estudiando y tras finalizar el docu-reality nos enseñaron que había vuelto al instituto. Pero, parece que sin la disciplina de doña Alicia, las cosas no le van tan bien y en el bachillerato y sacaba peores notas que en Curso del 63. Acabó siguendo los pasos de Marta y protagonizó otro número de Interviú. Hoy en día es dependienta en Londres de Michael Kors.
- Carmen Madrigal: Especie de niña del exorcista sevillana. Para colmo su madre aseguraba que antes era peor. Eso sí, toda la fuerza se le va por la boca. Al final Carmen estaba empeñada en decir que había aprendido a expresarse, pero que no sabía cómo decirlo. Tras el concurso participó de pretendienta y tronista en Mujeres y hombres y viceversa, algo que se veía venir.
- Silvia Cabanillas: Cuando volvió de la cuarentena lo hizo de mala leche y exigió que Doña Alicia le pidiera perdón
por el retrasopor haber creado el virus en un laboratorio que la tuvo enferma o algo así. Fue la cabecilla de un motín que solo fue secundado por Inma. A partir de ahí estuvo rebotada casi por todo. Hoy en dia vete tu a saber que es de ella.
- Jennifer Sánchez: Aprendió de esta experiencia a... perder el tiempo y pasar desapercibida. Con ese nombre cualquiera encuentra información.
- Laura Abellán: Abandonó en el segundo episodio porque estaba triste de que el sol se pusiera.
Chicos
Héctor durante un tiempo se ganó la vida
de chulo-discotecas
- Kevin Juan Roselló: Hermano gemelo de Falete que cuando entró sus andares y maquillaje hasta el culo hacía sospechar que era vecino de la acera del frente. Poco tiempo después quedó claro que quedarse atrapado en un cuarto oscuro con él era una sentencia de muerte del ojete. Hasta Paco Clavel es más varoníl. Por suerte no pasó de la peluquería, ya que el muy mariconazo se negó porque el pelo era su vida. El karma seguro que la regala en el futuro una calvicie galopante. Intentó entrar en Gran hermano 13. Hoy en día seguramente se gana la vida de transformista en un bar gay.
- Pau Montaner: Cani ciclado, que algunos creyeron ver una especie de eslabón perdido de la humanidad que según cuenta él entró al programa con dolores de cabeza y ansiedad, por lo que a los pocos días el equipo médico del programa le aconsejó regresar a casa. Resultó que tenía Gripe A avanzada y no le llegaron las vacunas que encargó Trinidad Jiménez a tiempo. Cómo la pilló, solo lo sabe él, la gallina y el bote de vaselina. Tras el concurso decidió presentarse como concursante de Gran Hermano 12.
- Héctor Calvo: Chulo playa que iba de malote con el cuello a lo Eric Cantona que iba por libre. La soberbia encarnada. Tras el programa participó como invasor en el programa Invasores de Neox. Hoy en dia dice ser modelo, pero lo más seguro es que sea camarero.
- Daniel Martín: Vago al que le echaron en la ESO por hacer dibujos ofensivos de sus profesores. Estuvo desaparecido gran tiempo, ya que cogió la gripe. Su máxima aportación fue pintarle los cuernos al cuadro del fundador del centro Don Saturnino.
- Alberto García Durán: Perroflauta que seguro que hoy en día es miembro del 15M que inició la rebelión absoluta.
- David García: Hermano gemelo de Mesut Özil y lameculos y pelota oficial. Feo como su puta madre, pero que las tenía a ellas en la palma de una mano. Don Luis le nombró líder del grupo y el muy pringao se lo creyó. Le castigaron sin desayunar y se vengó robando chorizo a Don Luis.
- Iván Latorre: Pringao del que todos sus amigos se reían y él no se enteraba. Nada más entrar le dieron unas gafas que le hacían parecer Milhouse, lo que daría lugar a una mítica lucha por ir sin gafas. Si ya parecía un nerd sin ellas con ellas ya era hostiable.
- Joshua López: Cani que lleva tatuado el nombre de su ahijado en la mano. Su chulería casi le cuesta que Don Luis le echara. La que no se libró fue una cama que pagó su ira.
- José Estrems: No se hizo notar hasta que Héctor por enésima vez con su egoismo jodió al grupo y casi se quedan todos sin ir a la piscina.
- Mario Jiménez: El típico gaditano que va de graciosete que no soportaba la leche caliente... ni tibia.
- Kiko Forero: Llegó en sustitución del folla-gallinas y fue iyendo al sol que más calentaba. Acabó fregando platos y con infulas de ser el nuevo Juan Magán.
- Alejandro Gil: Llegó en sustitución del marica. Más bien fue un intercambio de mariquitas. En este caso menos maricón pero lo compensaba con creces siendo muy llorica.