Tal y como dije hace dos días voy a contar en esta entrada (con un día de retraso, lo siento ayer no tuve tiempo) los temas tratados en el curso "Ser Periodista. Cinco puntos de observación" empezando por el lunes en el que hablaron Fernando González Urbaneja e Iñaki Gabilondo, que es el director del curso. En general, para los periodistas y estudiantes de periodismo no se dijeron muchas cosas realmente nuevas, pero nunca se sabe así que por eso lo pongo. Para los que no estén muy familiarizados con las charlas y las clases que suele haber en las universidades supongo que sí que resultará más interesante y novedoso. Y sin más preámbulo comencemos a hablar del curso que se celebra esta semana en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.
Lo primero fue la breve presentación del curso, en el que Iñaki Gabilondo explicó que ha tratado de reflejar diferentes aspectos de la profesión y lanzó un mensaje de esperanza para los estudiantes de periodismo, becarios y periodistas en situación precaria: "El futuro no está escrito, no se puede decir que esta sea una generación perdida y quien lo diga no está autorizado".
Fernando González Urbaneja
¿Quién es?En la actualidad tiene columnas en ABC y 20 Minutos y se le puede escuchar y ver en varias tertulias de radio (en ABC Punto Radio) y televisión. Fue presidente de la Federación de Asociaciones de la prensa de España, director de Cinco Días y jefe de economía en El País. También ha sido profesor en la Universidad Carlos III de Madrid y actualmente está en la Universidad Antonio de Nebrija.
Iñaki Gabilondo al presentarlo lo definió como una especie de Da Vinci del periodismo español y que podría ir al curso todos los días pues ha estado en todos los aspectos del periodismo.
¿De qué habló?
El título de su charla fue "Tras años de decepción, hay futuro por descubrir". A partir de ahora trataré de organizar la charla por temas y aportando toda la información y datos que pueda.
Pasado, presente y futuro del periodismo
Fernando González Urbaneja empezó hablando sobre la situación laboral actual y la comparó con la situación que se encontró él en los últimos años del Franquismo. Utilizó la metáfora de un páramo, pero no uno verde en el que construir sino uno en el que hay que rotular para poder construir.
Empezó en el Diario Madrid, del que conserva la última primera página que se publicó en 1971 cuando se produjo su cierre administrativo. "La situación en ese sentido ha mejorado", dijo, "ahora ya no se cierra un medio por la decisión de un funcionario, ya no un presidente ni un ministro". Para el que no lo conozca el Diario Madrid fue el medio más crítico con el franquismo. Se fundó en 1939 y en el 66 comenzó su etapa conocida como los cinco años gloriosos, año en el que cambió de propietarios a gente partidaria de una apertura del régimen como Ramón Calvo Serer (del Opus). Se nombró director a Antonio Fontán (un monárquico) y entraron en el mismo periodistas jóvenes como Miguel Ángel Aguilar, José Oneto, Miguel Ángel Gozalo o David Solar. La publicación representó la entrada de monárquicos y liberales antifranquistas en la prensa y publicó algunos artículos históricos como en el que se decía que "la democracia es incontenible y hay que buscar una solución centrista" o en el que se hablaba de que De Gaulle debería retirarse en mayo del 68 con referencias veladas a Franco. Antes de su cierre definitivo, afrontó muchas multas, sanciones y ceses temporales por estar comprometido con la democratización política, económica y social.
"Desde entonces ha habido años muy malos, malos, buenos y muy buenos". Sobre el año 2012 dijo que se estaba produciendo una "destrucción masiva de empleos, esperanzas y autoestimas. Estamos en una situación irritante y frustante". A pesar de todo, dijo que hemos vivido los mejores 30 años de la historia de España.
Acerca del papel del periodista contó que una vez un político le recriminó que los periodistas lo criticaban todo y él le respondió que eso era el trabajo de un periodista.
González Urbaneja reflexionó también sobre que el papel del ser humano en la vida es trabajar por su felicidad y por dejar algo mejor de lo que se encontró, cosa que ahora mismo no se está haciendo porque a las generaciones venideras se les están dejando recortes, peores jubilaciones y todo malo salvo el mundo de la red. Esto nos lleva a nuestro siguiente tema.
La doble crisis del periodismo
En los últimos años se ha dicho muchas veces que el periodismo sufre ahora mismo dos tipos de crisis. La primera es la económica que sufre todo el mundo, pero agravada porque la publicidad (principal fuente de ingresos de la prensa, única en televisión, radios y medios digitales que no sean de pago) es lo primero que recortan las empresas. La segunda es la crisis tecnológica, provocada por el surgimiento de Internet y las posibilidades que este ofrece. Se trata de una crisis del modelo del negocio que todavía las empresas no han sido capaces de solucionar ni en los medios tradicionales (sobre todo los periódicos) ni a adaptarse al nuevo medio (no se ha dado todavía con una fórmula que logre rentabilizar del todo la publicidad en una web).
Fernando González Urbaneja declaró estar aburrido de este debate y dijo que algunos querían tapar la crisis de modelo usando excusas y echando la culpa a alguien de fuera.
"Estamos en las vísperas de una nueva era. El viejo editor ha fracasado, no se ha adaptado" dijo sobre este nuevo mundo influido por la tecnología. Citó unas palabras de Steve Jobs sobre este mundo "No podemos prescindir del criterio editorial de los grandes medios" matizando que este criterio reside en las explicaciones satisfactorias por las que alguien está dispuesto a pagar.
Sobre esto último yo me pregunto, ¿un artículo que no es demasiado honesto con la actuación de un político, por poner un ejemplo, y da una imagen distorsionada de la realidad, pero que satisface a alguien que se sienta cercano a ese político y pagar por él entra en ese periodismo de calidad?
Soluciones a esta crisis
Al igual que en política se requiere "más Europa" Urbaneja dijo que la solución a la crisis es "más periodismo". Recomienda volver a los viejos principios (ética, responsabilidad política, control al poder, libertad de expresión, transparencia...) y reivindicar el periodismo salido de la Segunda Guerra Mundial, que estaba pendiente de los derechos humanos.
Recomendó la lectura del libro Los últimos días (1976) de Carl Bernstein y Bod Woodward (periodistas del caso Watergate) sobre la dimisión de Nixon. Advirtió que la libertad que en estos días tienen los periodistas, mayor que antes, tiene ventajas y riesgos.
Política y periodismo
El Gobierno (tanto de unos como de otros), dijo González Urbaneja, ha estado presente en muchos de los eventos que han ocurrido en los últimos años entre las empresas mediáticas, como la guerra del fútbol (por los derechos de emisión entre Mediapro y Sogecable).
Según él el periodismo se estropeó cuando el encargado de negociar la concesión de licencias de radio y televisión fue el Gobierno (hay que ir a concurso público, en cambio para prensa o un medio digital no es necesario). Paralelamente se desarrollaron las empresas multimedia lo que conduce al fracaso del periodismo (confluyen intereses de la empresa que posee un periódico, una radio o una tele, acercándose la línea editorial del periódico al Gobierno, por ejemplo, para obtener una licencia).
La relación entre política y periodismo, continuó Urbaneja, también se ve en el reparto de tiempo (y espacio) de la información. "La agenda cada vez llega más dictada por los partidos y los medios son predecibles" lo que provoca que los ciudadanos se alejen de ellos.
Para profundizar en esto recomendó la lectura de La civilización del espectáculo (2011) de Mario Vargas Llosa, en la que el premio Nobel critica la banalización de los medios, la literatura y de los intelectuales.
Audiencias, fuentes y transparencia
Urbaneja también criticó la obsesión por las audiencias. Dijo que se confunde calidad con cantidad, pero que es verdad que nunca hay que perder de vista la rentabilidad que los medios deben tener para existir.
Habló de un desprecio al ciudadano en la falta de transparencia y al dar noticias sin fuentes. Sobre estas, dijo que tienen que ser fuentes de verdad, y no charcos. "Las fuentes de ahora son vaporosas, pocas y muy interesadas".
Criticó además la gestión de las rectificaciones en casi todos los medios, por ser muy mala y fallar mucho. Como medio más fiable señaló a The Guardian, el que más rectificaciones publica, lo que hace que el defensor del lector del medio diga con ironía que "debo trabajar en el peor medio porque es el que más rectifica". The Guardian también salió como mejor medio, siguió Urbaneja, según un estudio de medios internacionales y españoles de dos profesores universitarios de Madrid en el que se analizaron parámetros como las quejas que publica, las rectificaciones,el control de las informaciones, el respeto a la intimidad y al honor, la presencia de anuncios clasificados, etc. Como segundo en este estudio quedó The New Yor Times y la mayoría de los diarios de cabecera españoles suspendieron.
Para tener más credibilidad señaló la importancia de enseñar más el propio trabajo del periodista y ser más transparentes.
Para terminar criticó que los medios no controlen cómo hacen lo que quieren hacer y los EREs de SER y EFE (del que culpó al Gobierno) y dijo que se precisan nuevos profesionales que tengan la capacidad de respuesta que no tienen los actuales responsables.
Turno de preguntas
Tras terminar su charla dio comienzo el turno de preguntas. Por ser más dinámicos lo haremos por pregunta-respuesta:
Pregunta: Se le recriminó el no haber abordado el hecho de que se despida de las redacciones a los periodistas con más experiencia, lo que la persona que hizo la pregunta consideraba el principal problema del periodismo.
Respuesta: Urbaneja dijo que esto se debía a los malos convenios, la mala inserción, los contratos que rompen la formación, que hace que un periodista no pueda tener una fidelidad hacia su medio. Añadió que él ya lleva denunciando estos temas durante algunos años y que fue miembro de la Comisión de Intelectuales de TVE, donde no se recomendaron los EREs por edad. Como buenos ejemplos citó a la cadena COPE y a Google, donde el 10% de la jornada laboral se dedica a la formación. Dijo que los despidos y los EREs eran también en parte culpa de unos sindicatos conformes con los mismos y en cierto modo de los propios profesionales.
Pregunta: Sobre la desmotivación que provocan algunos profesores universitarios frente a otros que dejan más huella.
Respuesta: Admitió que la Universidad puede fracasar en la referencia y que hay que estimular la creatividad y que cada cual (profesor) mejore en su campo. Defendió que se deberían dar más ciencias base en la universidad como política, historia o economía y criticó que se vaya poco a clase (por la parte que me toca en esto me manifiesto muy en contra, por lo menos no es mi caso, es una gran oportunidad poder ir a la Universidad a aprender, aunque es cierto que en algunos casos te preguntas si de verdad no se podría aprovechar mejor el tiempo. Sobre las ciencias base, sí estoy de acuerdo en que cuanto más sepa un periodista mejor será, pero he de decir que creo que sería mejor desarrollar las habilidades periodísticas antes que buscar la especialización en temas generales y asegurar prácticas a los alumnos).
Sobre el profesorado universitario me gustaría añadir, por si alguien no lo sabe, que se hace una distinción entre el que investiga y el que da clases. Se supone que tienen que hacer ambas cosas no limitarse a una, pero algunos están solo interesados en una de las partes. Por ejemplo, profesores interesados en dar clases y organizarlas se encuentran con que los que más interesados en investigación, si tienen cargos toman decisiones sobre cómo se deben dar las clases, cuando lo suyo sería que lo decidieran los que quieren y les gusta dar clase de su especialidad. También nos encontramos con investigadores que plagian otros trabajos sin citarlos, pero eso ya es otro asunto.
Pregunta: ¿Hasta qué punto es importante estudiar periodismo para ser periodista?
Respuesta: "He contratado a muchas personas en los últimos años y algunas de ellas no habían estudiado la carrera de periodismo como el corresponsal de El País en China, que es ingeniero, pero hizo el máster de El País o el propio director del medio, Javier Moreno Barber, que era licenciado en Ciencias Químicas y después hizo el máster de El País.
Pregunta: Preguntaron sobre si el tiempo de lectura de noticias es muy pequeño y si la gente lee poco.
Respuesta: Dijo que hay un interés por la información instantánea pero también por el detalle y la opinión de un especialista. Hay de todo, quién quiere todo más corto y quién lo quiere más largo. Expresó que hay que adaptarse, ser multimedia y ser capaces de responder a las demandas del público. Explicó cómo se trabajaba antes y ahora: "Antes se iba a una rueda de prensa, se volvía a la redacción, se tomaba un café y luego se escribía hacia el final de la tarde para desesperación del redactor jefe. Ahora se envía un SMS/Tweet desde la rueda de prensa, un flash o artículo para la web cuando termina desde un portátil o un iPad y luego cuando se vuelve a la redacción se puede ampliar".
Creo que si vosotros habéis llegado al final de esta entrada, que ha quedado bastante larga, ya tendréis la respuesta a si la gente lee poco, ¿no?
Hasta aquí se desarrolló la intervención de Fernando González Urbaneja en el curso. En la próxima entrada hablaré sobre la de Iñaki Gabilondo en el primer día del curso, que fue la que siguió a esta que acabamos de ver. ¡Hasta la próxima entrada!