En México hay 398 especies de insectos comestibles. Entre las más comúnes y conocidas están los chapulines, el gusano de maguey, hormigas, avispas, gusano de madroño, etc, etc. No están consideradas precisamente dentro de una dieta de día a día, más bien son como un platillo exótico ocasional.
Al igual que los animales, los insectos tienen mucha proteína. Más o menos unos 100 gramos de insectos proporcionan 121 kcal. Así que tampoco está nada grave, 100 gramos es bastantito en peso bicho. De hecho si comparamos 100 gr de carne de res contra 100 gramos de insectines, la res tiene como un 55% de proteína y el insecto tiene como un 75%. Además tienen algo de vitaminas, no mucho pero algo es algo, se digieren rápidamente y tiene una vida de almacén muy larga así que al restaurant o tiendita le conviene. Entonces creo que a final de cuentas son buena opción como fuente de proteína. Digo, ya si los comen empanizados, fritos, con crema, con 1 kilo de tortillas, con 1 litro de Coca.... pues ya estamos hablando de otras cuestiones.
Ahora, en la cuestión del gusto pues ahí se rompen géneros. Yo la verdad me abstengo, aunque sepan deliciosos prefiero vivir sin probarlos. Así que del sabor de cada uno, ya me tendrán que decir ustedes. Yo ya cumplí la labor nutrimental.