El mes de mayo es el mes por excelencia para la migración de limícolas en Asturias. Pasan en grandes cantidades y además la gran mayoría en su espectacular plumaje nupcial, dado que se dirigen a sus zonas de reproducción en el norte. Es el caso del chorlitejo grande Charadrius hiaticula, en el que machos y hembras presentan dimorfismo sexual.
Las aves que pasan ahora, a mediados de mes, proceden de las grandes zonas de invernada de aves limícolas en el oeste de África. Una de las especies mayoritarias es el chorlitejo grande, del que pueden registrarse decenas, o en los mejores días de sedimentación centenares de ejemplares. Dos lugares buenos para verlo en Gozón son las ensenadas de Bañugues y Llodero, de donde proceden las fotos de la entrada.
¿Hacia donde se dirigen los chorlitejos que ahora nos visitan? Los estudios de radiomarcaje de los últimos años han ayudado a comprender mejor las rutas migratorias de estas aves. Así, en estos bandos de chorlitejo de mayo en Asturias se encuentran dos subespecies. La primera, la tundrae, se reproduce desde el norte de Escandinavia hacia el este, hacia Siberia. Investigaciones realizadas en el norte de Noruega muestran que los chorlitejos que allí crían invernan en África, y están de vuelta para la reproducción a finales de mayo o principios de junio.
La segunda subespecie que se encuentra en estos bandos de chorlitejo grande es la subs. psammodroma, que se reproduce sobre todo en Islandia y Groenlandia. Estudios de anillamiento y radiomarcaje muestran como el área de invernada de estas poblaciones es muy amplia, haciéndolo una buena parte de ellos en los humedales del oeste de África.
Por lo tanto, ambas subespecies pasan por aquí aún juntas, pero no lo harán por mucho tiempo. Unas aves pronto tomarán rumbo noroeste, y a través de las islas británicas saltarán a sus cuarteles de cría, mientras otras lo harán siguiendo el litoral europeo. Pasada esta zona de división, todas las aves observadas serán de la subespecie tundrae, como pasa en los humedales holandeses.