Dead Space II

Dead Space 2 / Visceral Games - Electronic Arts / PC - PS3 - Xbox360

Hace unos días publicábamos en este mismo blog mi comentario acerca de “El Poder de la Fuerza II”, la segunda parte del título de LucasArts, y mi veredicto final fue muy especifico: era un título innecesario.
Innecesario porque sufre de aquel mal que sufren tantas secuelas de no pintar absolutamente nada, de apestar a sacacuartos y a un burdo intento de seguir viviendo del cuento… Secuelas de juegos que ya habían quedado atados y bien atados y cuya idea de secuela, a priori, se antoja ridícula.

Dead Space 2, secuela del título sorpresa de Visceral Games en 2008, parecía seguir por esos mismos derroteros, por esa misma sensación de innecesidad…
La historia del primero quedaba atada y bien atada, el destino del protagonista no podía ser más explicito y sinceramente, Visceral Games ya había conseguido su propósito original, demostrarnos a todo el mundillo su enorme talento cuando no les cortan las alas.

Además, ese desesperado intento por parte de Electronic Arts de convertir el título en una franquicia de éxito con cómics y películas ya atufaba un poco.
Entonces, ¿para qué una secuela? ¿Qué podía aportar Visceral que llamase realmente la atención? ¿Por qué no dedicar su talento a otras empresas?
Vamos, que no os voy a engañar… A priori Dead Space 2 se me antoja un título igualmente innecesario, como se me antojaba el título de LucasArts; lo considero un evidente intento de seguir sacándonos los cuartos…
Eso sí, ojalá todos los sacacuartos del mercado estuvieran tan bien hechos como éste.

No estaba muerto, él también estaba de parranda...

El argumento del título, para que engañarnos, es una retardez del tamaño del Kilimanjaro… Despedimos al personaje como lo despedimos en la precuela, para reencontrarnoslo atado con una camisa de fuerza en un extraño hospital de una estación espacial.
¿Cómo ha llegado Isaac Clarke hasta allí? Buena pregunta, nadie parece dispuesto a darnos respuestas coherentes, probablemente porque no tendrían sentido.
Y es que si Isaac Clarke ha salido algo perjudicado por la experiencia, el pobre hombre parece el más cuerdo en varios kilometros a la redonda viendo el nivel de retardismo que exhiben algunos habitantes de la estación…

Aparentemente han pasado nosecuantos años, y por aquellas cosas de la vida, justo el día que recuperamos el sentido, los bichos de la precuela han infestado la estación espacial. Ya es maldita casualidad…
El juego intenta hilar una historia, pero ya no es solo que la coherencia brille por su ausencia, es que llega un momento en que simplemente decides desconectar y disfrutar sin más del juego.
Hay guiños muy sabrosos a la precuela, pero ya está… Su historia no tiene interés, como tampoco la tenía para mi la de la precuela.
Aquí hemos venido a disfrutar del placer de cortar a cachitos a bichos mutantes y nada más.

O los bichos a disfrutar del sabor de nuestras carnes...

En resumidas cuentas, Dead Space 2 es más de lo mismo, pero con un evidente mayor presupuesto, lo que lo convierte en un Dead Space más grande, más desmesurado y más refinado que nunca.
Y eso, evidentemente, no es malo. Precisamente es lo que ha de ser una buena precuela… No ha de ofrecer algo rotundamente diferente ni tampoco exactamente lo mismo (como sí hacía, por ejemplo, Bioshock 2), sino todo lo que hizo grande a la precuela, con esos finos toques de calidad que otorgan la experiencia y un mayor presupuesto.

Se notan todas las mejoras con pocos minutos de juego… Técnicamente es muy superior, hay muchas más armas, muchos más enemigos, algunos puzzles han cambiado a mejor y la ambientación, el gran fuerte del original, está más cuidada que nunca.
Por si fuera poco, los chicos de Visceral son listos, tanto que han decidido eliminar aquellos momentos de tedio del original, convirtiendo al título en una experiencia dinámica, sin pausas, que te mantiene en vilo y que aunque tenga sustos más que previsibles, siempre consigue tenerte el culito bien prieto.

¿Es que nadie piensa en los niños?

La ambientación, esa delicia técnica de la precuela, insisto, está más cuidada que nunca… El juego ha dado el salto de la claustrofobia y soledad que otorgaba la nave protagonista de la primera entrega al terror de pasear por las desgarradas localizaciones de una estación espacial desolada.
Es un cambio notable, pero igualmente muy bien llevado. Y es que hay pocos momentos mejor planteados que nuestro periplo por la escuela y la guardería de la estación, por citar tan solo uno de ellos.

El terror no es el único punto destacable del título, también lo es la casquería gratuita, porque el juego se recrea, y como, con la sangre y las muertes de Clarke…
Un pequeño error de calculo y tendremos que contemplar, a la fuerza, como nuestro rival se toma su tiempo en desmembrarnos lentamente y en jugar con nuestros miembros amputados. Hay momentos de tal sadismo que parecen más sacados de un Mortal Kombat que de un título así…

El pobre Isaac ya no podrá ser cabeza de familia...

Dead Space 2 es un evidente ejemplo de juego lineal, “scriptado” como dirían algunos… Un aspecto que solemos asociar automaticamente como negativo pero que, si me permitís la reflexión, en juegos como éste es todo lo contrario.
Es evidente que el juego de Visceral no podía ser un juego de mundo abierto y que los sustos guionizados son una necesidad del género.

En DS2 es imposible perderse, siempre sabes donde tienes que ir pese a que aparentemente la estación espacial tenga infinitos recovecos y miles de posibilidades. Lo disimula excelentemente bien.
Y la mecánica sigue siendo básicamente la misma de su precuela… Los cuatro puzzles puntuales de siempre, desmembrar enemigos con un arsenal digno de Bricomania para pasar a aplastarlos a pisotones, con su consiguiente satisfacción, usar el arma gravitacional de todo tipo de lucrativas maneras y poco más… Una formula que funcionó ayer y sigue funcionando hoy.

Decían pero, que para la ocasión las cosas habrían cambiado, y que a diferencia de la precuela en que la mejor arma era la primera, la pistola de plasma, en esta ocasión no iba a ser el caso.
No se ustedes señores, pero yo he vuelto a pasarme éste título con únicamente susodicha arma. Sí que las otras armas han ganado en utilidad y en alguna ocasión las he utilizado por mera diversión, pero susodicho utensilio sigue siendo, de lejos, el mejor del juego.

Fuck Yeah!

Algo por cierto, que ha conseguido rebajar sustancialmente mi opinión del juego, dejando a un lado esa facilidad tan obscena de morir aunque en parte relacionada, es los muchos momentos de la acción en que mueres sin saber porque…
Os aseguro que la cosa es bastante dramática; andas tan pancho por un pasillo y de repente los miembros de tu cuerpo deciden separarse como por arte de magia.
Sí vale, seguro que había una mina, unos pinchos, que se yo… Pero no por eso deja de joder menos. Especialmente en plena batalla contra algún enemigo gigantesco, en que no puedes estar precisamente atento por donde pisas.
Como dirían en ingles, hay muertes muy baratas. Y todo por esta ansia de sangre y gore gratuitos.

Completa el título un modo online, una pseudo versión de los versus de Left 4 Dead con ingenieros contra bichos, del que los expertos aseguran está terriblemente desequilibrado.
No opinaré de él pues apenas lo he probado, pero como la mayoría de los juegos más recientes de Electronic Arts, el tufo a excusa para seguir vendiendo los infames pases online es más que evidente.

Y poco más puedo decir… Bueno, no he dedicado un párrafo en exclusiva a sus apartados técnicos, pero creo que ya queda más que claro a lo largo de todo el articulo que son excelentes.
Ambientar bien un juego no es fácil, hacerlo tan magistralmente mucho menos… Y mejorar lo que ofreciste en la precuela es digno de mención.
Adoro el juego con la oscuridad y la luz artificial, sublime, y su sonido, simplemente soberbio, la mejor excusa que jamás tendréis para adquirir un 5.1.
Sabiamente combinados crean uno de los mejores trabajos de ambientación que servidor ha visto jamás en un videojuego de terror.

Dead Space 2 sigue teniendo una ambientación espectacular, en todos los aspectos.

Dead Space 2, imagino, es lo que pretendía. Un Dead Space 1 mejor y más grande. Y lo hace con creces, con sus excelencias y sus fallos.
Una demostración más del enorme talento de los chicos de Visceral Games, los cuales no dudo en afirmar estaban completamente desaprovechados hasta que nos asombraron a todos con esta saga.

Es un juego divertido, entretenido, y muy refinado en aspectos técnicos, ideal para aquellos a los que gusta pasar un poco de acojone frente a la pantalla. No es una obra maestra desde luego, ni una exquisitez atemporal, pues tiene algunas carencias que le apartan de la gloria, pero eso no quita que pueda ir con la frente bien alta.
Básicamente consigue su propósito, divertir y mucho al jugador con su corta campaña para un jugador… Y eso es más de lo que pueden afirmar otros muchos títulos.

Puntuación: Recomendable.