Sólo una vez sentados en un bar hablábamos de la música sin parar, y yo te decía Gracias Manolo por hacerme levitar.
Gracias porque desde que te conocí, mi vida es mas vida y he aprendido a canturrear.
Ahora la soledad ya no es mi centro, si no que tú, adornas mis espacios acariciando mis lagunas con tenues acordes que suenan rítmicos, pausados y acompasados.
Un día volveremos a encontrarnos, mientras te dedico estas líneas para que sepas lo agradecido que sigo por haberte conocido.
Músico loco, amo tus letras y sufro tus ausencias eres único, artista como la copa de un pino, eres un pájaro de barro…
Y volveremos a encontrarnos sentados en un bar, oyendo silbar a la libertad, compartiremos el cielo de esa ciudad soñada, de calles sitiadas por un pueblo disconforme que lucha por romper sus cadenas y alzar el vuelo ladrando-le al cielo.
Sueño despierto, como antes ,como siempre… Leo tus letras y vivo soñando, cargo mis maletas llenas de una eternidad temporal, que me conforma me complace.
Admiro tu arte maestro, duermo silbando tus acompasados sonidos que adormecen mi alma, serenan mi ignorancia manteniendo en mi interior la llama de tu obra que nunca se apaga.
Me despierto al fin, solo fue un sueño, un eco de una realidad ansiada, pero estoy contento compadre por haberte conocido aunque solo fue un dulce recuerdo, un fantasma, un instante que pensé había vivido.
Gracias Manolo por hacerme sentir un tipo normal, que disfruta escuchándote, acercándome a la felicidad etérea, etern@…!!