Del Theremin al iPhone

Uno de los instrumentos de música que siempre me ha fascinado y llamado la atención es el Theremin.

Se trata de uno de los instrumentos más extraños que existen. Inventado en 1928 por los rusos para impresionar al mundo, es el único instrumento musical que "se toca sin tocar".

La mejor forma de comprender esto, es ver un vídeo ilustrativo.

“Tocando” el Theremin

Básicamente se compone de 2 antenas que detectan la posición de las manos para reproducir sonidos. La antena vertical sirve para determinar el tono y la antena horizontal para el volumen. El funcionamiento de este instrumento está basado en la capacidad que tiene el cuerpo humano de conducir la electricidad, modificando así los campos electromagnéticos que generan las antenas.

Bajo mi punto de vista se trata de un instrumento bastante poco práctico y tan difícil de tocar, que llega a ser un tanto inútil... Es curioso cuanto menos y sin duda, muy sorprendente (especialmente para ser inventado hace más de 80 años), pero yo no lo incluiría en una orquesta sinfónica.

Bien, y entonces... ¿qué tienen en común este instrumento tan intrigante con el archiconocido iPhone?

No mucho la verdad, salvo una de las cosas que hacen al iPhone y otros smartphones realmente prácticos y fáciles de usar: la pantalla táctil.

En realidad no solo son estos smartphones, sino lo que se conocen como dispositivos táctiles capacitivos.

No todos los dispositivos táctiles son capacitivos. Capacitivos son, por ejemplo, los que se pueden encontrar en todos y cada uno de los ordenadores portátiles fabricados en los últimos 8 años, esto es, en los trackpad que se vienen utilizando como sustituto del ratón.

También encontramos esta tecnología en la popular click-wheel de los iPods.

Básicamente lo que hacen es detectar la capacitancia de nuestros dedos, que viene a ser algo así como la capacidad de albergar electromagnetismo en el cuerpo humano. Es decir, lo que necesitamos es una fuente capacitiva, como lo es nuestro cuerpo o un dispositivo especialmente pensado para ello. Ese es el motivo por el que los trackpads, click-wheels y iPhones no funcionan con guantes u objetos pasivos como los lápices stylus de las PDAs.

Las PDAs y algunos smartphones (por ejemplo, el Nokia 5800) tienen una tecnología distinta llamada pantalla táctil resistiva, con la cual sí es posible utilizar esos stylus o cualquier otro objeto (dedos incluidos, of course) para puntear la pantalla. Sin embargo, el coste de esto es una importante disminución de la velocidad de respuesta y sensibilidad.

Lo más interesante de todo, es que esta tecnología que parece tan ultra-moderna y que vemos en los iPhones y teléfonos de hoy en día, no es tan novedosa como podríamos imaginar, ya que está basada en la detección de la capacidad eléctrica del cuerpo humano, algo que ya se inventó antes de que la mayoría de nosotros existiéramos, en 1928, con el innovador Theremin.

Para que luego digan que los inventos inútiles no sirven para nada :P