Delfín Quishpe, también conocido como Delfín hasta el fin, es el Michael Jackson del subdesarrollo. Famoso por ser cantante por consumo irónico y político, por consumo irónico también.
Logró notoriedad en los años 2000 por su casposo videoclip sobre las torres gemelas y por si eso no fuera poco, aquella cosa de En tus tierras bailaré.
Desde muy joven cantó en casinos y bares pequeños. Cuanta cantidad de alcohol se consumía en esos locales no sabemos. Para soportar eso, mucho.
Lanzó dos discos: El faraón del ritmo (2001) y El gallito (2003). No los hemos escuchado, pero seguro que es sida auditivo.
Se hizo famoso en 2007, cuando lanzó su canción Torres gemelas. 6 años después del atentado.
En 2010 logró otro hitazo con En tus tierras bailaré con La Tigresa del Oriente y Wendy Sulca. Un We Are The World andino dedicado a Israel vaya usted a saber porqué.
En 2011 lo logró otra vez con Todo hombre es un minero, en apoyo a los 33 mineros chilenos... que hacía un año que habían sido rescatados.
A partir de ahí ya no tuvo mucha repercusión. Lanzó en 2014, su canción del mundial de fútbol llamada Vamos al Mundial y en 2018, un videoclip en lengua indígena Juvaleñita, pero no caló.
En 2019 empezó a dedicarse por completo a la política y llegó a ser alcalde de Guamote. Pero por lo visto, aprovechó la plandemia pandemia para sacarse su dinerito y el fiscal pidió hasta 5 años de cárcel y puede que la próxima vez baile en tierras del patio de la cárcel.